Alberto Rojo (PSOE): “El modelo de ciudad para Guadalajara debe estar ligado al campus universitario”

Alberto Rojo, durante la presentación del plan de reordenación del tráfico en el entorno del nuevo campus universitario. // Fotos: PSOE Guadalajara.

ENTREVISTA / ALBERTO ROJO, CANDIDATO DEL PSOE A LA ALCALDÍA DE GUADALAJARA

“Remunicipalizar el servicio de limpieza es complejo jurídicamente, pero hay que lograr que Guadalajara deje de ser una de las ciudades más sucias de España”

“Urge cambiar la distancia por la cercanía, la imposición por el diálogo y apostar por la participación ciudadana”

“El nudo de Cuatro Caminos demuestra que la capital se ha convertido en un caos circulatorio”

“La única papeleta que puede propiciar el cambio en Guadalajara es la del PSOE. Hablaré con todos, pero no pactaré ni con el PP ni con Vox”

“Si soy alcalde, lo seré al 100%. Una ciudad de casi 100.000 habitantes se merece un alcalde a tiempo completo”

“El andamio de la Plaza Mayor y el cierre de todo, hasta de Hernando, son los símbolos de la desidia del PP en el casco histórico”

“Sancionaremos a los propietarios que declaran en ruina sus edificios y a los dueños de los solares que no presentan un programa de rehabilitación”

El candidato que desafía la hegemonía del PP después de 12 años de Antonio Román en la Alcaldía de Guadalajara es Alberto Rojo Blas (Guadalajara, 1975). Ex alcalde de Hita y diplomado en Ciencias Empresariales por la Universidad de Alcalá, ha ejercido durante los últimos cuatro años de delegado provincial de la Junta de Castilla-La Mancha, cargo desde el que ha tenido que lidiar en numerosos asuntos (movilidad, gestión medioambiental, urbanismo) con el Ayuntamiento que ahora aspira a encabezar. En esta entrevista sostiene que el mandato de Román está “agotado”, cree que la herencia de los populares ha “parado” la capital alcarreña y apuesta por un modelo de ciudad cimentado sobre el campus universitario, el parque tecnológico, una movilidad sostenible y un cambio radical en la gestión de la limpieza urbana. 

¿Cuál sería la primera medida que tomaría si es elegido alcalde?
Tres medidas. Primero, es urgente cambiar la distancia por la cercanía, la imposición por el diálogo y apostar por la participación ciudadana como forma de Gobierno. Cuando visito los barrios, mucha gente me dice que ya era hora que alguien viniera por aquí. En segundo lugar, considero una prioridad que Guadalajara deje de ser noticia a nivel nacional por ser una de las ciudades más sucias de España. Y, finalmente, hay que aprobar un presupuesto municipal porque Antonio Román [alcalde de Guadalajara] no ha sido capaz de hacerlo, precisamente, por la falta de diálogo.

¿Cuáles son las bases de su candidatura?
Queremos poner en marcha un nuevo modelo de ciudad. Hay claves importantes: el diálogo, la participación, la cercanía. Queremos dedicarle todo el tiempo del mundo. Si soy alcalde, lo seré al 100%. Sin distracciones. He firmado ante notario que no tendré otro cargo público. No me voy al Senado ni a otras instituciones. Una ciudad de casi 100.000 habitantes se merece un alcalde a tiempo completo. Tenemos entre manos muchas acciones importantes, como generar oportunidades en el ocio, en la vida diaria de las personas y, por supuesto, en un empleo de calidad. El empleo ahora se basa en exceso en la precariedad. Tenemos que generar suelo industrial para atraer empresas, tal como han hecho municipios del entorno de Guadalajara. Especialmente, empresas con base tecnológica en las que la I+D+i tenga un papel importante. Vamos a apostar por un Parque Científico y Tecnológico que pueda irradiar innovación al tejido productivo de Guadalajara. Se trata de retener talento aprovechando el nuevo Campus universitario. Por otro lado, tenemos que darle la vida a la ciudad de Guadalajara.

El casco histórico se ha deteriorado notablemente durante los últimos años. ¿Qué propone para revitalizarlo?
Nuestra carta de presentación en el casco histórico no puede ser la de solares vacíos, la de carteles de se vende, se traspasa o se alquila. Hay que darle un nuevo impulso. Queremos recuperar el casco histórico para que sea vivo a través de un plan específico. Hay que devolver al centro el dinamismo perdido con Román. El andamio de la Plaza Mayor y el cierre de todo, hasta de Hernando, son los símbolos de la desidia con el PP. El corazón de la ciudad languidece. En la época de Jesús Alique se aprobó un Plan Especial del Casco Histórico, pero Román lo metió en un cajón cuando llegó a la Alcaldía. Vamos a potenciar nuestro patrimonio, crearemos un programa de cultura en la calle, incentivaremos la apertura de locales en el centro y aplicaremos un plan de dinamización del comercio. También nos comprometemos a sancionar a los propietarios que declaran en ruina sus edificios y a los dueños de los solares que no presentan un programa de rehabilitación en dos años. Promoveremos un programa para tapar el impacto visual de los edificios en ruina, hasta que los podamos reconstruir. Mediante un programa de arte urbano se puede embellecer la ciudad.

Rojo, candidato socialista a la Alcaldía, durante un acto de campaña en Guadalajara.

Hace unos meses se firmó el convenio con la Universidad de Alcalá (UAH) para la construcción del nuevo Campus Universitario. ¿Qué aporta este proyecto a la ciudad?
El campus es el reto más importante de la ciudad de Guadalajara en los próximos años. Si soy alcalde me comprometo a estar perfectamente coordinado con el Gobierno de Castilla-La Mancha y con la Universidad de Alcalá, y a no estar poniendo piedras en las ruedas, como ha estado haciendo Román. No hay que hacer frentismo político. La Junta de Castilla-La Mancha pone 50 millones de euros para la construcción del campus y la UAH siempre está a la altura de la circunstancia. El alcalde, hasta ahora, solo ha hecho que poner pegas. Tenemos que programar la implantación del campus de Las Cristinas, que incluya también la reforma integral de la estación de autobuses, que redunde en la reordenación del tráfico y que favorezca la utilización de los locales comerciales interiores. Tenemos que reforzar la movilidad entre la estación de autobuses y la de trenes. Doblaremos el número de aparcamientos en el triángulo entre la estación de autobuses, el cementerio y el instituto Brianda de Mendoza. El modelo de ciudad está ligado al modelo del campus universitario.

Una encuesta de la OCU sitúa a Guadalajara entre las 17 ciudades más sucias de España. ¿Cree que la solución a este problema pasa por remunicipalizar el servicio?
Seguramente esa opción ahora es compleja jurídicamente porque existe una concesión a una empresa a largo plazo. El Ayuntamiento ha hecho unas adjudicaciones a muy largo plazo. Pero con los ingredientes que tengamos al alcance, tenemos la obligación de hacer que Guadalajara sea una de las ciudades más sucias de España. Porque esto no lo digo yo, sino la OCU, una organización independiente y respetada. De las 60 ciudades que ha auditado, ocupamos el número 50. Hay que barrer en todo los barrios, sin dejar a ninguno de lado, y además hacerlo bien. Apostamos por un Plan de Rescate de Barrios para que todos sean de primera. La ciudad debe estar cohesionada.

La reforma de la ribera del Henares ha causado una honda polémica en la ciudad por sus consecuencias medioambientales. ¿Qué opina?
He sido claro con esto. Las obras en el cauce del río no me parecen acertada, ni mucho menos. No sé por qué hay que adoquinar la ribera del río. En los últimos años hemos tenido tres inundaciones. Hay que declarar la zona de especial protección para que todas las actuaciones que se tengan que hacer en la margen del Henares tengan que pasar su preceptivo informe de protección ambiental. Debemos recuperar el río desde un punto de vista natural, lo que exige limpiar el cauce, generar rutas, fomentar el uso de la bicicleta y la conexión de un nuevo puente. Y todo eso conectado a la Finca de Castillejos.

El nudo de Cuatro Caminos está considerado como uno de los puntos negros del tráfico en Guadalajara. ¿En qué consiste su política de movilidad?
La capital se ha convertido en un caos circulatorio. Hay que apostar por una movilidad del siglo XXI sostenible y centrada en alternativas al vehículo privado. La circulación de coches no puede convertirse en un caos. Guadalajara es conocida en nuestro entorno como la ciudad de los atascos. Iniciaremos, junto al Gobierno de Castilla-La Mancha y el de España, la construcción de la Ronda Este, como continuación a la Ronda Norte impulsada por gobiernos socialistas. Se trata de conectar la N-320 con la A-2 desde El Sotillo. También tenemos que conseguir en Cuatro Caminos separar los peatones del vehículo, tienen que ir a distinto nivel. Si yo hubiera sido alcalde de Guadalajara estos últimos años, el segundo acceso al Hospital ya estaría hecho. Y hay que pedir el desdoblamiento de la N-320 en el nudo de Cabanillas para que exista una verdadera circunvalación de Guadalajara. El Gobierno de Castilla-La Mancha está trabajando en alternativas sobre la CM-101, especialmente, por la Ciudad del Transporte. El expediente de esta carretera lo dejó caducar Cospedal. Hay que hacer una vía rápida, ya aprovecharemos más adelante para dejarla más bonita. Hay que ejecutar la rotonda entre el Puente Árabe y el inicio de la CM-101.

El carril bici creado por el Ayuntamiento de Guadalajara ha cosechado críticas de cicloturistas y de usuarios. ¿Es peligroso tal como se ha diseñado?
El carril bici no se ha hecho con una estrategia clara ni se ha hablado con la gente. Se han pintado trozos de la ciudad para parecer más moderno. Intentaremos aprovechar lo que hay porque ya está hecho, pero hay tramos que son peligrosos, como en Los Manantiales, que debemos eliminar.

¿Qué modelo de Ferias y Fiestas defiende?
Lo primero, que sean un motivo de orgullo y de convivencia, no un foco de conflicto. Queremos un modelo consensuado con los vecinos. Hay que hablar con las peñas, los comerciantes y los hosteleros. Ahora no contenta a nadie por la falta de diálogo de Román. Las Ferias y Fiestas de este mes de septiembre de 2019 van a tener el mismo modelo porque no hay tiempo material para cambiarlo. Pero sí considero que el modelo actual no funciona. Desde el día siguiente hay que trabajar entre todos para proponer el modelo de 2020, que debe ser el del cambio.

El candidato del PSOE a la Alcaldía de Guadalajara, durante una visita a la Colonia Sanz Vázquez.

¿Cuándo se recuperará el Alcázar de Guadalajara?
Es un edifico abandonado por parte del Gobierno municipal, que no ha estado a la altura. Ha entrado en la Lista Roja de Hispania Nostra. El Gobierno de Pedro Sánchez va a inyectar 1,5 millones de euros a través del 1,5% Cultural. Debería ser una prioridad. La actuación del Gobierno de España ha obligado al Ayuntamiento a colaborar.

Según sus encuestas internas, ¿qué resultados manejan?
Vemos ilusión, cara y ojos de cambio en Guadalajara. Hemos creado el Plan Escuchándote y hemos visitado todos los barrios de la ciudad. El equipo de Gobierno no ha tenido esa cercanía con los vecinos. Vemos ilusión por el cambio después de 12 años de gobierno de Antonio Román. Guadalajara está parada y nosotros la vamos a poner en marcha. Ése es nuestro lema. Manejamos el pálpito de la calle y la ilusión de la gente, que cree que Guadalajara necesita un cambio.

¿Con qué fuerzas se plantea pactar, en caso de que el PSOE sea la formación más votada?
Salimos a ganar las elecciones porque creemos que el cambio es posible, pero depende de la movilización de las personas. Quien quiera un cambio debe movilizarse y apostar por él. La única papeleta que puede propiciar el cambio en la ciudad de Guadalajara es la del Partido Socialista Obrero Español. Hay ilusión y ganas por transformar esta ciudad, pero no hay que dar nada por hecho. Román y el PP pueden gobernar con fuerzas extremistas esta capital. Proponemos un cambio tranquilo y sensato, pero también con mucha ambición y determinación. Queremos tener una mayoría amplia de los ciudadanos y las ciudadanas. Queremos pactar con los vecinos y las vecinas de la ciudad. Iremos más deprisa si lo hacemos solo con nuestro programa. Eso sí, tengo claro que no vamos a pactar con Vox ni con el PP. Vemos la ciudad de una manera distinta a lo que se ha hecho estos años. A partir de ahí, las fuerzas políticas tendremos que hablar. El diálogo debe ser importante.