García Molina dimite como diputado para no conceder todo el peso de Podemos en las Cortes regionales a David Llorente

Como vicepresidente del Gobierno regional no hubiera podido participar en los debates parlamentarios en calidad de representante de Podemos. García Molina ha optado por renunciar a su escaño para evitar dar en las Cortes todo el peso al diputado por Guadalajara, David Llorente, rival orgánico del líder regional de Podemos.

El secretario regional de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina, presentó este viernes su dimisión como diputado en las Cortes regionales, donde ejercía también como vicepresidente primero de la Mesa desde el 18 de junio de 2015, ante su próxima entrada en el Ejecutivo de Emiliano García-Page, donde previsiblemente ocupará una vicepresidencia.

Según él mismo explica en un vídeo colgado en su perfil de Facebook, que también se puede ver en el perfil de Podemos Castilla-La Mancha en esa misma red social, García Molina adelanta que su sustituta en el Parlamento será la actual secretaria de Organización de la formación morada, María Díaz, a la que desea “mucha suerte en esta nueva andadura, informa Europa Press.

“Se abre una nueva etapa en Podemos Castilla-La Mancha”, continúa el responsable de Podemos en la región, que recuerda que, como habían dicho en sus documentos y consultas, ahora “tocaba madurar sin envejecer” y detalla que el momento en el que están preparados para gobernar “ha llegado”.

La razón de fondo que explica la renuncia de Molina al escaño en Gilitos es que en calidad de vicepresidente del Gobierno autonómico, el líder regional de Podemos no podría participar en los debates parlamentarios como diputado regional. Esto hubiera dejado todo el peso del grupo de Podemos en las Cortes de Castilla-La Mancha a su compañero de bancada aunque rival en lo orgánico David Llorente, diputado por Guadalajara. La única alternativa que le quedaba a Molina, por tanto, era dejar el escaño del Parlamento.

En su declaración grabada, García Molina asegura que en esta nueva etapa que ahora se abre están “muy ilusionados”, tienen una “gran responsabilidad” y están “convencidos” de que con la “capacidad, determinación y la responsabilidad” que van a asumir serán “capaces de hacer las cosas un poquito mejor”.

De hecho, la dimisión de García Molina será uno de los asuntos que aborde la Mesa de las Cortes en la reunión que tiene prevista el próximo lunes, 7 de agosto. Previsiblemente, la toma de posesión de la nueva diputada de Podemos tendrá lugar el 10 de agosto en las Cortes.

El Gobierno de Castilla-La Mancha será el primero de coalición entre el PSOE y Podemos en toda España, después de que las bases de ambos partidos hayan ratificado este paso. El ofrecimiento de García-Page a Podemos pasaba por una Consejería que se encargase de gestionar el Plan de Garantías Ciudadanas ideado por Podemos y amparado en los presupuestos que entrarán en vigor próximamente, una estrategia dotada con cerca de 120 millones de euros para intentar garantizar rentas, suministros y vivienda a quienes más lo necesiten.

Aunque todo apuntaba a que sería la ‘número dos’ del partido en la región, María Díaz, quien podría asumir esta competencia -ha estado presente en la ronda de negociaciones en la que cristalizó el acuerdo-, ahora queda en el aire qué miembro de la formación morada acompañará a García Molina, llamado a ocupar una Vicepresidencia, en el Consejo de Gobierno.