En la historia de la aviación está llena de accidente aéreos, unos más graves que otros, con más o menos fallecidos y heridos. Bien es verdad que estos accidentes suceden ya en muy pocas ocasiones y todo ello gracias a los medios técnicos que hoy en día dispone la aviación tanto civil como militar.
Pero hace años cuando se pilotaba casi a “ojo” el riesgo de accidentes aún era mayor al no haber tantos instrumentos y ayudas a la navegación aérea.
Guadalajara y su provincia se encuentran en un pasillo aéreo por el que pasan diariamente cientos de aviones tanto militares como comerciales, con destino o salida desde el aeropuerto Madrid-Barajas “Adolfo Suárez” o el de Torrejón de Ardoz, y sin contar las avionetas y helicópteros civiles que surcan nuestros cielos.
Este pasillo aéreo fue, y aún lo sigue siendo, la aproximación a Torrejón de Ardoz, que durante muchos años fue base de utilización conjunta hispano-americana. Por este pasillo aéreo y en las maniobras de aproximación a la base, se produjeron numerosos accidentes, especialmente de aviones pertenecientes a la USAF (las Fuerzas aéreas americanas), nueve de ellos con destino a la citada base.
En este fin de semana recordamos el triste aniversario de tres de estos accidentes aéreos que dejaron tres fallecidos, uno por cada uno de ellos. Dos ocurrieron el 5 de diciembre, en 1965 y en 1988, por lo tanto, hace 60 y 37 años respectivamente. Y el tercero fue el 6 de diciembre de 1959, cumpliéndose 66 años del accidente.
Los accidentes
Era el 5 de diciembre de 1965, domingo
En las cercanías de Iriépal, se estrella un caza North American F-86 Sabre del Ejército del Aire que efectuaba un vuelo entre las Bases de Morón y Torrejón de Ardoz, falleciendo su único ocupante. El fallecido era el capitán don Rafael Castilla Puerta, de 27 años, que pertenecía a la Base de Morón de la Frontera.
El avión impactó fuertemente contra el suelo sobre las trece y veinte de la tarde, según indicaba el reloj de pulsera, marca Cauny, que tenía el piloto en la pulsera y estaba intacto tras el impacto del aparato en el paraje «Las Navas», en el término municipal de Iriépal, a unos seis kilómetros de Guadalajara y no lejos de la carretera de Centenera. Se sabe que el aparato había establecido ya contacto con la base conjunta de Torrejón de Ardoz, en la que pensaba aterrizar.
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Según el testimonio de unos cazadores que se hallaban cerca, en el monte de Villaflores, vieron pasar el avión a ras de tierra y poco después oyeron la explosión que produjo al estrellarse.
Los restos del avión siniestrado quedaron esparcidos a lo largo de casi un kilómetro, y lo único que quedó intacto fueron las ruedas del tren de aterrizaje y parte del motor.
La prensa de la época se hizo eco del accidente. Tanto Nueva Alcarria en su edición del 11 de diciembre, como Flores y Abejas en la del 7 de diciembre, publicaron información del suceso; como así mismo lo hizo el Diario Pueblo en su edición del 6 de diciembre en despacho de la agencia CIFRA y seguramente, pero no lo hemos podido constatar, hicieran lo propio el resto de los periódicos nacionales que se editaban en Madrid
De este suceso publicamos la fotografía del avión accidentado.
Lunes 5 de diciembre de 1988
En el Monte Alcarria, entre Chiloeches y Guadalajara, entre las 19,15 y 19,30, se estrelló un caza F-16 de la USAF que realizaba un vuelo de entrenamiento, falleciendo su piloto, el general-jefe de la XVI Fuerza Aérea de EE.UU. en Euroра, Winfield S. Harpe, de 51 años.
Varios testigos del accidente vieron unas luces blancas y después una gran llamarada de fuego. El F-16 accidentado cumplía una misión de entrenamiento y se dirigía a Torrejón cuando sobrevino el accidente.
Los restos del avión accidentado fueron localizados sobre las ocho y cuarto en el camino de Rueda al Pozo de Guadalajara, y se encontraban diseminados en un radio de unos trescientos metros.
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Efectivos de la Guardia Civil rodearon el lugar del accidente, al que no tuvieron acceso los medios de comunicación para la realización de fotografías de los restos del aparato. El juez militar, un comandante del Ejército del Aire español, declinó dar ningún detalle sobre las causas del accidente, que dijo no se conocerían hasta que se elaborara el informe.
Tal fue el secretismo por parte del personal militar tanto americano como español, que, al gobernador civil de la provincia, José Luis Machuca, se le denegó la información con el nombre del piloto de la aeronave, lo que propició una queja formal de este ante las autoridades militares.
Domingo 6 de diciembre de 1959
El accidente de un caza F-86 Sabre del Ejército del Aire sucedió en las cercanías de Galápagos falleciendo su piloto en el acto, el teniente don Luis Revuelta Salinas, de 23 años y perteneciente al ala de caza número 6 con base en Torrejón. El avión siniestrado formaba parte de un grupo de tres aviones que procedían de Palma de Mallorca y se dirigían a su base de Torrejón.
Sobre las tres y media de la tarde el maestro nacional de Galápagos, don Juan José Orea y los vecinos del mismo pueblo, Justo Martinez y Luis Torija, observaron que tres aviones volaban casi a ras del suelo apreciando instantes más tarde que uno de ellos se estrellaba a corta distancia de donde se encontraban, remontando bruscamente el vuelo los dos aviones restantes, que, al elevarse, se separaron y uno de ellos aterrizó en Torrejón y el otro en Zaragoza. El accidente tuvo lugar en el en el paraje «Los Getares», a unos dos kilómetros y medio del pueblo de Galápagos.
Los restos del avión, un reactor F-86.C-5-221, quedaron desparramados a lo largo de unos quinientos metros y el cadáver del piloto apareció trágicamente mutilado a más de 400 metros del punto en que se estrelló su avión. Estaba atado a la silla y presentaba grandes destrozos en las piernas y en la cabeza.
Otros accidentes ocurridos en la provincia
Con aviones militares: 23. Nueve de ellos americanos con base o destino a la de Torrejón de Ardoz. Con 93 fallecidos y 30 heridos de distinta gravedad.
10 de agosto de 1915 en Guadalajara con el resultado de un muerto y veintidós heridos. Explosión del globo de hidrógeno “Alfonso XIII” ocurrida en el parque militar de aerostación de la capital alcarreña. Se produjo en el momento en el que se estaba procediendo a su llenado.
20 de febrero de 1929. En algún punto de la provincia de Guadalajara. El teniente Antonio García-Morato, hermano del “As” de la aviación española Joaquín García-Morato, resulta gravemente herido al estrellarse su avión cuando se disponía a aterrizar en el aeródromo de la capital alcarreña. Fallecería diez días más tarde a consecuencia de las heridas sufridas.
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1 de mayo de 1929, en Cabanillas del Campo. Accidente de un avión militar perteneciente a la Escuela de Vuelo de Guadalajara, falleciendo su piloto.
20 de abril de 1930, en Guadalajara. Se estrelló un avión militar cuando se disponía a aterrizar en el aeródromo de la capital alcarreña en situación de fuerte viento de costado, falleciendo su único tripulante, el capitán Fernando Pérez Pando.
10 de junio de 1930, Guadalajara, con un fallecido. Accidente de un aparato de la Aviación Militar a la Escuela de Transformación que se estrelló tras chocar con el cable de anclaje de un globo cautivo.
6 de marzo de 1931, Guadalajara. Un caza Avro 504 de la Aeronáutica Militar se estrelló sobre el aeródromo de la capital alcarreña tras entrar en barrena, falleciendo su piloto.
4 de abril de 1939, en las cercanías de Alcolea del Pinar (Guadalajara). Tres Dornier 17 de la Aviación Nacional de una formación de cuatro que cubrían un vuelo entre los aeródromos de Alfamén y Azuqueca de Henares se estrellan debido al mal tiempo con el resultado de 11 muertos. Los aviones viajaban a Madrid para participar en una revista que iba a ser presidida por el general Franco y posteriormente en el desfile de la victoria que se iba a celebrar en la capital de España.
25 de noviembre de 1946, en Valdenoches (Guadalajara). Un Junkers Ju 52 perteneciente a la escuela de vuelo sin visibilidad de Salamanca se estrelló contra una colina debido a la niebla. Falleciendo 6 personas y cuatro resultaron heridas.
29 de septiembre de 1950, en el término de Galápagos (Guadalajara), con el resultado de 4 muertos y 3 heridos. Un CASA 352 del Ejército del Aire de España se estrelló al intentar un aterrizaje forzoso.
2 de febrero de 1956. En el término de Peñalba de la Sierra (Guadalajara). Un avión Junkers Ju 52 del Ejército del Aire de España, que volaba de Valladolid a Zaragoza, se estrelló en Peñalba de la Sierra. Fallecieron 7 personas. Se tardaron siete días en encontrar los restos del aparato y evacuar a los pilotos fallecidos, ya que se desconocía exactamente el lugar del impacto, y también por las nevadas y nieblas que impedían a los aviones de reconocimiento encontrarlo, siendo buscado por todos los pueblos de la zona de la Sierra Norte.
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5 de octubre de 1958, entre Buendía y la provincia de Guadalajara. Un avión del Ejército del Aire de España que volaba desde el aeródromo de Caudé (Teruel) al de Getafe se estrelló por causas desconocidas, dejando un balance de 6 muertos.
18 de enero de 1960 en las cercanías de Marchamalo, con el resultado de un muerto. Un caza F-86 D de la USAF destacado en la base de Torrejón se estrelló en las inmediaciones de la finca de El Cañal tras sufrir un incendio en vuelo.
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5 de mayo de 1960 Checa (Guadalajara). Un F-86 Sabre de la USAF destacado en la base de Torrejón de Ardoz se estrelló en el paraje de las Camarreras a unos quince kilómetros de la localidad e Checa, un lugar de difícil acceso y muy alejado de cualquier localidad; se saldó con el fallecimiento de su único ocupante.
27 de mayo de 1960 Guadalajara. En la finca “El Cañal”, a unos 4 kilómetros de la capital y muy cercano a la carretera de Humanes, se produjo el accidente de una avioneta CASA 1131 del Ejército del Aire perteneciente a la base de Alcalá de Henares, falleciendo sus dos ocupantes.
3 de junio de 1971 en Centenera (Guadalajara). Un avión cisterna KC-135 de la USAF se estrelló en medio de una tormenta a menos de 100 metros del casco urbano de la localidad de Centenera. Afortunadamente los tanques del aparato iban vacíos. Fallecieron sus 5 ocupantes. Cumplida información en La Crónica de Guadalajara.
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28 de agosto de 1973, en el término de Hueva (Guadalajara). Con el resultado de 24 muertos y un herido. Un avión Lockheed C-141 Starlifter de la Fuerza Aérea de Estados Unidos se estrelló en Hueva. Se da la circunstancia que este es el accidente con mayor número de víctimas de los ocurridos en la provincia de Guadalajara.
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6 de febrero de 1976. En las cercanías de Cabanillas del Campo (Guadalajara). Un avión cisterna KC-135 de la USAF se estrelló cuando se disponía a aterrizar en la base aérea de Torrejón. cobrándose la vida de seis personas.
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14 de enero de 1981. Término de Aragoncillo, a unos 15 kms. de Molina de Aragón (Guadalajara). Un cazabombardero F-4 Phantom de la USAF destacado en la Base Aérea de Torrejón se estrelló cuando realizaba un vuelo de entrenamiento, con el resultado de dos muertos.
4 de abril de 1989. En las cercanías de Taracena (Guadalajara). Un caza Northrop F-5 del Ejército del Aire se estrelló cuando se disponía a aterrizar en la Base Aérea de Torrejón de Ardoz. Falleciendo sus dos ocupantes.
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22 de marzo de 2000. Cercanías de Herrería (Guadalajara). Un avión CASA C-212 Aviocar perteneciente al 408 Escuadrón del Ejército del Aire de España se estrelló en un pinar denominado «Prado de Cubillejo», probablemente a causa de las malas condiciones meteorológicas. El avión era un aparato de guerra electrónica y realizaba un vuelo entre las bases aéreas de Morón de la Frontera y Zaragoza. Fallecieron sus siete ocupantes.
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Accidentes con aparatos civiles
Un total de 14 accidentes, que se cobraron la vida de 26 personas y dejó 12 heridos de diversa consideración.
30 de agosto de 1921. Guadalajara. Un avión que estaba siendo sometido a pruebas de vuelo se estrelló sobre el aeródromo de la capital alcarreña. Fallecieron 2 personas.
13 de octubre de 1958. Término de Embid (Guadalajara), a unos 4 kilómetros de la localidad. Una avioneta (matrícula EC-AMG) capotó al intentar un aterrizaje de emergencia posiblemente al quedarse sin combustible tras desorientarse debido a malas condiciones de visibilidad. Fallecieron el acto sus cuatro ocupantes
19 de julio de 1975. Usanos (Guadalajara). Accidente de una avioneta AISA I-11 perteneciente al Aeroclub de Guadalajara. Con el resultado de dos muertos.
29 de julio de 1977. Término de Robledillo de Mohernando (Guadalajara). Accidente de una avioneta, sin que se tengan más datos. Fallecieron sus dos ocupantes.
19 de abril de 1978. Aeródromo de Robledillo de Mohernando (Guadalajara). Accidente de una avioneta perteneciente al Aeroclub de Guadalajara que se estrelló en el interior del citado aeródromo. Con el resultado de dos muertos.
25 de julio de 1982. Ujados (Guadalajara). Accidente de un planeador perteneciente a la escuela de Fuentemilanos (Segovia). Falleció su único ocupante, un piloto alemán de 40 años.
4 de agosto de 1990. Huertapelayo. Villanueva de Alcorón (Guadalajara). Un helicóptero Bell 204 con matrícula EC-EKB, que regresaba de la extinción de un incendio en el término municipal de Vadillos (Cuenca), sufrió un accidente sobre las 15 horas. El helicóptero impactó fuertemente contra el suelo cuando realizaba un aterrizaje de emergencia tras parársele el motor en vuelo debido a una avería. Resultando muerto el piloto de la aeronave y dejando 8 heridos de distinta consideración.
1 de mayo de 1991. Cogolludo (Guadalajara). Una avioneta perdió sustentación al pasar de volar en contra del viento a volar a favor y entrar en una zona de turbulencias y colisionó con la cima de una colina. Con el resultado de un muerto y un herido.
12 de febrero de 1995. Mesones, El Casar (Guadalajara). Accidente de una avioneta que se estrelló cuando sus tripulantes realizaban un vuelo de prácticas. Falleciendo en el acto tanto el instructor como el alumno, dos jóvenes de 25 y 26 años.
15 de julio de 1997. Illana (Guadalajara). Accidente de una avioneta cisterna que participaba en la extinción de un incendio forestal. Se saldó con un fallecido.
1 de mayo de 2000. Sigüenza (Guadalajara). Un ultraligero motorizado cayó en picado cuando efectuaba la maniobra para su aterrizaje en el campo de vuelo existente en la citada localidad. Fallecieron dos personas.
9 de septiembre de 2009. En Razbona (Guadalajara). Un fallecido y una persona herida. Un autogiro ultraligero se estrelló tras sufrir una pérdida de aceite en el motor.
12 de agosto de 2015. Aeródromo de Robledillo de Mohernando (Guadalajara). Una avioneta Zenair CH 640 con matrícula EC-XBD cayó al suelo cuando sobrevolaba las proximidades del aeródromo existente en la localidad citada a causa de una entrada en pérdida. Con el resultado de tres muertos.
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28 de enero de 2024. Alarilla (Guadalajara). Una avioneta civil se estrelló en el monte de la Muela. Con dos fallecidos. El aparato había salido de un aeródromo en Teruel y se dirigía al de Robledillo de Mohernando.
El accidente tuvo lugar sobre las 13,15 estrellándose el aparato en un paraje de difícil acceso, por lo que tuvo que intervenir un helicóptero de la Guardia Civil para el rescate de los fallecidos. Posteriormente al accidente la avioneta se ha incendiado.
Fuente: Medios de comunicación, Biblioteca Virtual de Prensa Histórica, Anexo Accidentes de aviación en España y Hemeroteca de la Sección Local de la Biblioteca Pública de Guadalajara.
