La Cabalgata de Reyes pone el broche de oro al programa de Navidad

Cogolludo ha vivido unas navidades intensas. A continuación del ciclo de conferencias, que tenía lugar al principio del mes de diciembre, organizado por la Oficina de Turismo con la colaboración del ayuntamiento, otras asociaciones de la villa ducal se han sumado para realizar actos solidarios o representativos de estas fechas navideñas.

La presencia de Melchor, Gaspar y Baltasar en las calles cogolludenses ha tenido lugar en la tarde de hoy, viernes, 5 de enero. Después de confirmar que habían recibido todas las cartas de los niños, comenzaron su periplo por el municipio en la casa tutelada, donde entregaron los regalos a los residentes.

Tras esta primera parada, los Reyes Magos –y todo su séquito– se dirigieron hasta la carretera de Espinosa de Henares, donde comenzó la cabalgata. Un desfile que recorrió las principales calles de la población, hasta llegar a la iglesia de Santa María, donde repartieron los regalos.

En el trayecto, Sus Majestades se toparon con un Belén, emplazado bajo el arco del convento de San Francisco, un complejo monumental que fue fundado por el IV duque de Medinaceli, don Juan de la Cerda y Silva en 1557, y cuyos restos se encuentran ubicados en las puertas del parque «Mariano Colmenar».

Allí, los Reyes magos adoraron al Hijo de Dios y reemprendieron el camino, para llegar a su destino. De esta manera, la cabalgata llegó a la Plaza Mayor, su fuente y su formidable árbol de Navidad.

A continuación, Sus Majestades de Oriente se dirigieron hacia la calle Jesús y María, punto en el que giraron hacia la derecha para tomar la calle Juan de Mingo, antigua calle La Estrella. De esta forma, llegaron a la iglesia de Santa María.

En el interior del templo del siglo XVI, la concurrencia recibió diversos regalos. Sobre todo, los niños, verdaderos protagonistas de la fiesta. Un vecino del pueblo iba anunciando el nombre de cada beneficiario, que acudía con gran alborozo a recibir un único obsequio. Sin duda, fue una noche mágica, de la que disfrutaron grandes y pequeños. Además, la meteorología acompañó, ya que, aunque hizo frío y amenzaba lluvia, no cayeron precipitaciones. Ni lluvia ni nieve.