La despedida de un grande: el Ranas Folk baja el telón

Se trata de una de las propuestas musicales más conocidas de la provincia. Año tras año, ha cosechado un notable éxito de público y crítica. Centenares de personas se daban cita a mediados de junio en el valle del Ocejón –en plena «Arquitectura Negra» arriacense– para escuchar acordes de calidad. Y la concurrencia siempre salía satisfecha, gracias al magnífico nivel de los grupos participantes. Nos referimos al «Ranas Folk», un festival que –anualmente– se desarrollaba en alguna de las localidades de la vertiente occidental de la sierra del Robledal, en plena serranía caracense.

Sin embargo, no hay bien que 100 años dure. Y este certamen –tras casi dos decenios de andadura– también dice adiós. Una decisión que, desde la organización, han transmitido a través de una emotiva misiva, dirigida a “amantes y detractores” de la propuesta. “Esta carta es una despedida: todo lo que tiene un principio, tarde o temprano también tiene un final”, confirmaban los impulsores de la idea.

– Pero, ¿por qué han decidido poner punto y final a este festival musical?

– Pensamos que el «Ranas Folk» había cumplido con creces las expectativas –explica

Fernando Barbero, una de las cabezas visibles de la actividad–. Por tanto, hemos decidido finalizar el certamen, para ser sustituido por otro evento más ambicioso e interesante.
En este sentido, “creemos que hemos cumplido con el objetivo principal de este encuentro”, basado en “traer, difundir y disfrutar de la música y la palabra en un valle que, por allá el año 2003 [cuando comenzó la actividad], se hallaba necesitado de estos conceptos”. En ese momento, el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Campillo de Ranas –que, además de la cabecera, acoge a las pedanías de Robleluengo, Roblelacasa, El Espinar y Campillejo– era Fernando Barbero.

Este serrano nacido en Vallecas fue uno de los responsables de la iniciativa, y «alma mater» de la misma durante las últimas dos décadas. Gracias a su compromiso –y al de todos los colaborares del certamen– se ha conseguido diseñar un evento de calidad, que ha llegado a tener un relevante impacto nacional, transcendiendo –incluso– a las fronteras españolas.

“Por el «Ranas Folk» han pasado acordes, cantantes y músicos de Galicia, Gran Bretaña, Euskadi, Cataluña, EE.UU., Andalucía, las dos Castillas, Guinea Bissau, Madrid…”, aseguran sus responsables. ¡Todo un lujo! Además, nunca se ha olvidado el componente local. La inauguración siempre corría a cargo de la «Rondalla del Ocejón», una agrupación de música tradicional conformada por vecinos de la comarca, que ha pretendido recuperar las piezas ancestrales de la serranía arriacense. Entre ellas, el «toque de colmena», que estaba prácticamente desaparecido, y que debido al buen hacer de estos ciudadanos ha vuelto a sonar en Guadalajara.

A pesar de este compromiso y del trabajo realizado, los organizadores del «Ranas Folk» han creído que es el momento de despedirse y reformular esta convocatoria. No sin antes reconocer la labor de todos los que han estado involucrados en la propuesta. “Los agradecimientos van directa y sinceramente a las personas que ayudaron y apoyaron el festival a lo largo de su periplo”. Más concretamente, han querido poner en valor el trabajo del alcalde de Campillo de Ranas, Francisco Maroto, y de diversos colaboradores, como Jorge Pereira, Álvaro Pardo, María José Ramos y a Octavio (Tavi) Mínguez, una de las personas más implicadas con la rondalla del Ocejón.

Asimismo, han querido valorizar la labor realizado por las asociaciones de vecinos de Roblelacasa, Campillejo, El Espinar y Robleluengo, que –desde un primer momento– se quisieron comprometer con el certamen. Pero, “ante todo y sobre todo, anhelamos agradecer la labor de Toñi Bitria, artista sin límites mentales que ha embellecido este sencillo encuentro musical”. De igual forma, en la despedida del festival se ha hecho referencia al buen trabajo realizado por “aquellas personas que, de una forma u otra, han echado una maravillosa mano para que la música siguiera escuchándose en nuestro Concejo [en referencia al municipio de Campillo de Rana y sus pedanías]”. Todo ello, “sin olvidar a espectadores y espectadoras que viajaban cada año hasta nuestras plazas para disfrutar con nosotros”.

– Por tanto, ¿qué balance hacen de todos los años de este certamen?

– No puede ser más positivo, ya que hemos disfrutado de música africana, estadounidense, vasca, flamenco, tango, blues, country –asegura Fernando Barbero–. Una trayectoria en la que tampoco se debe olvidar las pandereteiras gallegas o los coros que tanta belleza sonora compartieron. En fin, no podemos estar más felices con nuestro «Ranas Folk».

De hecho, “no es fácil encontrar un hito entre tanta calidad”, confirma Barbero, en declaraciones en Henares Al Día. “Posiblemente, lo más resaltable haya sido que hemos sido capaces de mantener el alto nivel musical en todas las ediciones”. Por ello, “esta despedida no es el fin, ya que se está ideando un ambicioso y bello proyecto que, con la ayuda de todas y todos, llevaremos a cabo”.

Será una iniciativa que –al igual que el Ranas Folk– se desarrollará en las cercanías del solsticio de verano y que pretenderá ser una combinación de diversas artes creativas y culturales, que estarán abiertas a la ciudadanía en su conjunto. Sin embargo, “todavía es pronto para haber definido todos los detalles, pero cuando se encuentren bien atados, lo haremos público”, concluye Barbero. ¡Seguiremos informando!

El origen de todo
El «Ranas Folk» comenzó su andadura en el año 2003, como una iniciativa de la concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Campillo, que –por aquel entonces– encontraba comandada por Fernando Barbero. Desde ese momento, el festival se ha establecido como una propuesta imprescindible en el calendario provincial y regional. Además, se ha definido como un evento itinerante, en el que –cada edición– se realiza en una localidad del Concejo de Campillo. Gracias a ello, se ha desarrollado en poblaciones como Robleluengo, Roblelacasa, El Espinar, Campillejo o en el propio Campillo. Y, en todos los casos, ha cosechado una magnífica respuesta del público.

En consecuencia, la nueva propuesta cultural que están elaborando en el lugar del mencionado certamen –y que tendrá un concepto muy amplio– obtendrá una magnífica recepción por parte de la ciudadanía. ¡No faltes! ؘ