
Pedro Sánchez, ex secretario general del PSOE y candidato nuevamente a repetir en el cargo, estuvo en Guadalajara este martes marcando territorio, y lo hizo acompañado de algunos de los que ya se saben sus afines o seguidores como su amiga Magdalena Valerio o el propio alcalde de Azuqueca de Henares, José Luis Blanco.
Ante un aforo casi lleno, en el Multiusos de la capital alcarreña, y el mismo día en el que presentaba oficialmente su candidatura, Pedro Sánchez quiso aprovechar su presencia para elogiar a dos socialistas recientemente fallecidas como Carme Chacón y la consejera de Fomento en Guadalajara, Elena de la Cruz, a cuyos padres saludó personalmente y también al marido.
Tras guardar un minuto de silencio en la sala, en el turno de intervenciones, Sánchez dijo claramente a Mariano Rajoy que si el próximo 21 de mayo el resultado le es favorable, su oposición será “dura y contundente”.
Sanchez quiere que el PSOE vuelva a recuperar lo que tenía y que se coloque donde los militantes quieren, puesto estos son los que “con su voto, quitan y ponen a los secretarios generales”, decía.
Tras defender un PSOE unido, pidió a esos compañeros del propio partido que no usen el discurso del miedo de la derecha. Para este socialistas, las Primarias deben ser el “kilómetro cero del cambio social y político”.
En su intervención, Magdalena Valerio, defendió el claramente el proyecto de un partido socialista como el de Sánchez, que “no quiere ser la muleta de la derecha”.
En este acto se pudieron ver otros rostros muy conocidos como el de Daniel Jiménez, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Guadalajara y coordinador de la Plataforma en defensa de Pedro Sánchez, y la ex secretaria socialista, María Antonia Pérez León, y algunas caras de sindialistas y movimientos asociativos.