Sigüenza brilla en sus XIX Jornadas Medievales

Miles de visitantes disfrutaron de música en directo, de los más de 130 puestos artesanos que jalonaron toda la ciudad, de la mano de la animosa Asociación Medieval de la ciudad, que, junto al Ayuntamiento, organiza las Jornadas

La ciudad del Doncel ha vivido tres hermosos días de julio, de calor, pero seguntino, en la XIX Edición de sus Jornadas Medievales. Picaba el sol en las horas centrales del día, pero por la mañana, y al caer la tarde, la temperatura ha sido ideal para disfrutar del fin de semana legendario que proponían la Asociación Medieval y el Ayuntamiento de Sigüenza, con la colaboración de un buen número de empresas patrocinadoras.

El viernes por la noche, más concurrido que nunca, comenzaba con los acordes populares de la música medieval y el hechizo de las Brujas de Sigüenza. Cada año, son ellas quienes iluminan el casco viejo de la ciudad, llenándolo de velas, y esparciendo, en este caso, sus buenos augurios, entre seguntinos y visitantes.

Más de 130 puestos se abrían al público en la mañana del sábado, confiriéndole a la ciudad, también con sus mercaderías, los aires de otros tiempos, legendarios, que se buscan como atractivo turístico desde hace casi dos décadas por estas fechas. Viandas de todas clases, bisutería, orfebrería, libros de historia, artesanía local, camisetas hechas a mano, piedras preciosas o jabones, se podían encontrar en la ciudad.

Uno de los grupos que ha actuado en las calles de la ciudad este fin de semana ha sido el aragonés Ixera. “Como cada año, desde hace siete, animamos las calles de Sigüenza, transmitiendo alegría a la gente, y agradecidos y contentos”, decía uno de sus integrantes.

Sandra Serrano representaba, este año por primera vez, el papel de Doña Blanca de Borbón, personaje histórico que, como es bien conocido, es el eje de las Jornadas Medievales. Tiene 18 años, una edad similar a la que tenía la reina cuando llegó a la ciudad. Vivía su primera experiencia con una gran ilusión.

El sábado, a las doce de la mañana, los personajes históricos se daban cita en la Plaza de Don Hilario Yabén, para recorrer el casco antiguo de la ciudad. El cortejo le añadía brillantez a los monumentos por los que pasaba. Allí estaba, cómo no, Juan Gonzalo, que con sus bailes y reverencias precedía el desfile. Pedro I El Cruel, y su esposa, Doña Blanca de Borbón, así como el resto de personajes históricos, recorrieron las calles del Cardenal Mendoza, Plaza de Don Bernardo, Mayor, Travesaña Alta, Plazuela de la Cárcel, Puerta del Hierro, Portal Mayor, Castillejos y Plaza del Castillo, seguidos de todos los grupos musicales y de animación que han participado en las jornadas. En total, más de un centenar de personas.

A continuación actuaron todos los grupos que, a lo largo de los tres días, han amenizado las Jornadas Medievales: Ixera, Barromba, Barzonia, el Grupo de Danza de Manzanares El Real, los Dulzaineros de Alcalá, y los Caballeros de Baucan. “Este año hemos introducido algunos cambios que creo han mejorado el desarrollo del evento, algo que el público ha percibido positivamente”, explicaba Primitivo Alguacil sobre el desarrollo de las Jornadas.

Ya por la tarde, de nuevo, y aunque no sucediera realmente, partidarios de doña Blanca intentaron asaltar el Castillo para liberar a la reina de su confinamiento. Allí se escenificaron combates entre las tropas de Pedro I, El Cruel, y estos animosos seguntinos, que lamentablemente, no lograron el objetivo de rescatar a la reina. A continuación, tuvieron lugar las justas a caballo en el parque de las Eras del Castillo.

A partir de las diez de la noche, el corazón medieval de la ciudad se llenó de velas. Aparecieron las brujas, para extender sus conjuros, en este caso benefactores, sobre propios y extraños. Las acompañó el grupo de batucada de la banda de la Vera Cruz de Sigüenza. Ya por la noche, siguió la música, hasta altas horas de la madrugada.

El domingo, la ciudad ha revivido el destierro de Doña Blanca, camino de Jerez de la Frontera, un hecho histórico que sí sucedió realmente. Doña Blanca murió en Medina Sidonia por causa desconocida pero, con seguridad, no natural. El III Duque de Borbón, hermano de Doña Blanca, quiso vengar su muerte, y en 1366 envía una tropa al mando de Du Guesclin para apoyar a Enrique de Trastámara en su lucha contra Pedro I de Castilla y de León, ambos hermanos bastardos. Este mismo Du Guesclin es quien posteriormente en otro episodio histórico, ayuda a Enrique de Trastámara en su duelo fratricida con Pedro I, causándole la muerte en Montiel en 1369, e instaurándose así en Castilla la dinastía de los Trastámara. En este episodio es donde parece ser se pronuncia por Du Guesclin la célebre frase de «…ni quito ni pongo Rey, pero ayudo a mi Señor».

En el desarrollo de las Jornadas han colaborado un total de 200 voluntarios, entre personal de Cruz Roja, de Sigüenza y Guadalajara, Protección Civil, de Sigüenza, Guadalajara y El Casar, y voluntarios de la Asociación Medieval, además de Guardia Civil y Policía Local. “Agradezco a la Asociación Medieval su generosidad y esfuerzo para beneficiar el turismo hacia la ciudad y a todos los voluntarios que de una u otra manera colaboran, aumentando cada año el número de actividades, de visitantes y de participantes. Las Jornadas Medievales unen a la gente, a los seguntinos, nos recuerdan nuestra historia, animan a contemplar Sigüenza y sus monumentos, y toda su riqueza patrimonial, folclórica y gastronómica”, concluía el alcalde de Sigüenza, José Manuel Latre.

Galería de fotos gentileza Gabinete de prensa del Ayuntamiento de Sigüenza