Un grupo de voluntarios protege una encina centenaria en el Área Recreativa de Alcohete con tallos de ailanto

Organizada por la Concejalía de Medio Ambiente con la colaboración de la Asociación ‘Micorriza’, la jornada sirvió para eliminar los brotes del último año de esta especie invasora en esta nueva zona de esparcimiento y ocio

Invade el interior de los bosques, cunetas y caminos por la simple acción del viento dado que un ejemplar adulto puede producir hasta 350.000 semillas al año. Altera el normal funcionamiento del ecosistema forestal al aumentar el PH del suelo y es una especie invasora de zonas riparias, donde compite por el espacio y la luz. Produce toxinas en hojas y corteza, que al acumularse en el suelo inhiben el crecimiento de otras especies. Su sistema radicular y rebrotes persisten durante mucho tiempo si no se arrancan y puede alterar la disponibilidad de alimento para los herbívoros. Por su rápido crecimiento y su potencial alelopático, desplazan a la vegetación autóctona o dificulta su regeneración. Son algunos de los efectos nocivos que ocasiona el ailanto en los terrenos que coloniza y que se enumeran en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras. Este domingo, un grupo de voluntarios eliminó más de un centenar de ejemplares de esta especie en el Área Recreativa de Alcohete para darle una segunda utilidad a sus tallos.

La convocatoria consistió en la realización de un taller de trenzado con los tallos y troncos seleccionados de los ejemplares cortados de ailanto que poblaban este espacio natural. Una actividad organizada por la Concejalía de Medio Ambiente con la colaboración de la Asociación Nacional ‘Micorriza’ consistente en la construcción de una empalizada vegetal con ayuda de postes de madera para proteger una encina centenaria de más de 250 años de antigüedad que se levanta en esta área recreativa de reciente creación. ‘Se trababa de dar un segundo uso a una planta invasora con cuyos tallos hemos tupido una cerca viva que evitará el pisoteo y apelmazamiento excesivo de la tierra que rodea el tronco’, explica Vidal Gaitán, edil de Medio Ambiente. El longevo ejemplar de Quercus Ilex que se eligió para esta actividad figura en la guía de Árboles de Interés Local de Yebes y Valdeluz Con 2,5 hectáreas de superficie, el Área Recreativa de Alcohete se ha convertido en la tercera zona verde de mayor superficie del municipio.

La técnica del trenzado vegetal es utilizada desde tiempos inmemoriales para la construcción de vallados y cercados naturales y se aplica como una solución tradicional para la conservación de la biodiversidad. En este sentido, las ramas y tallos del árbol del ailanto son idóneas para este tipo de usos por su flexibilidad, adaptabilidad y resistencia. La jornada dominical se iniciaba con la tala de las plantas que han brotado en el último año, sobre todo, en el talud de la carretera que conduce al Sanatorio de Alcohete y que colinda con esta zona recreativa, a la que siguió la selección de las mejores ramas y varas. “En total cortamos más de un centenar de ejemplares de esta especie dominante, que en este año y medio de pandemia se ha reproducido de forma abrumadora”, indica Gaitán. Con los tallos amontonados se comenzó a trenzar la cerca sobre los postes ya colocados para ir conformando poco a poco esta original barrera protectora. A partir de ahora, se realizará un seguimiento de esta actuación para confirmar que ninguno de los tallos utilizados arraiga de nuevo y observar el tiempo de descomposición natural del cercado.

Esta jornada de voluntariado sirvió no solo para eliminar los brotes que han germinado en el último año en este espacio natural y evitar así su asentamiento, sino también para concienciar a los participantes en la necesidad de conservar la biodiversidad y favorecer la protección de la vegetación más vulnerable. “Que por su longevidad hemos querido personificar en las dos formidables encinas centenarias de un porte de 15 metros de altura que se localizan en esta zona”, precisa Vidal Gaitán. Que quiere agradecer la “inestimable colaboración” de los vecinos participantes en esta actividad dominical, “que deciden dar un paso adelante en beneficio de la comunidad y arriman el hombro un domingo, actitud que contrasta con la inoperancia de otros”. En apenas ocho meses, el Área Recreativa de Alcohete se ha consolidado como una “aceptable alternativa” a la zona de ocio y esparcimiento que se localiza a la entrada del bosque de Valdenazar.