Pasear debajo de los soportales en Tendilla

Cerca de Guadalajara capital, Tendilla aguarda algo alejada de la carretera tras la construcción de una variante de la N-320, carretera que antes cruzaba el pueblo. Ahora hay que desviarse, pero conviene hacerlo. “Tendilla es un pueblo de soportales planos, largo como una longaniza y estirado todo lo largo de la carretera”, reseñó Cela. El pueblo reposa en un hondón en el valle del Arroyo Pra. Los edificios soportalados siguen siendo una referencia inexcusable de la Alcarria. Tendilla es, además, una población con vida. Tiene varios restaurantes y tiendas que comercializan productos como embutidos y los famosos torreznillos. Su población roza los cuatrocientos habitantes censados. A finales de febrero mantiene una celebración que cada año va a más: la Feria de las Mercaderías dedicada a San Matías. Una cita magnífica, ahora convertida en reclamo lúdico y turístico, para recordar el potencial ganadero del que antaño disfrutó esta villa.

La persona que más y mejor conocía Tendilla era el malogrado investigador José Luis García de Paz, fallecido en octubre de 2013. No era su pueblo natal, pero como si lo hubiera sido. Publicó varios libros y multitud de artículos y ensayos sobre la que consideraba su patria chica. Escribió el profesor: “Tendilla está enclavada en la Alcarria, en una zona de serranía a ventipico kilómetros de Guadalajara, camino de los pantanos de Entrepeñas, Buendía y Bolarque. Debido a ello, hay “suficiente” paisaje para dar largos paseos por el monte y el pinar cercanos. El terreno es áspero pero incluye una pequeña vega junto al pueblo. En su mayoría se encuentra apenas modificado por la mano del hombre. Y por el terreno serrano no necesitamos aire acondicionado en verano”.

Físicamente Tendilla está en un largo y estrecho valle entre unas pequeñas montañas. Por ello “es larga como una longaniza”, en el decir celiano. El pueblo fue propiedad de los Condes de Tendilla, de la familia de los Mendoza a la que pertenecieron el Marqués de Santillana y sus hijos Pedro, llamado el Gran Cardenal Mendoza (ministro todopoderoso de los Reyes Católicos) e Íñigo, el primer Conde de Tendilla. El segundo Conde de Tendilla recibió las llaves de la Alhambra tras su conquista y fue su primer alcaide. Destacaremos a otros ilustres personajes como su hijo Diego Hurtado de Mendoza, literato y cronista, y a Ana de Mendoza, la Princesa de Éboli, descendiente del cardenal y supuesta amante de Felipe II. Como curiosidad, un tendillero fue Oidor en el Yucatán (México) en el siglo XVI.

En Tendilla tuvo lugar desde el siglo XIV hasta comienzos del XX la Feria de San Matías (24 de febrero). Como transcurría en invierno, se celebraba en los soportales de la calle Mayor para no mojarse, unos soportales cuya extensión rebasa los dos kilómetros de largo. La feria fue decayendo paulatinamente hasta que en el siglo XIX se redujo solo a la transacción ganadera. Sin embargo, durante los últimos años Tendilla ha recuperado esta celebración en todo su esplendor. Hoy la Feria de San Matías constituye uno de los principales acontecimientos festivos de la Alcarria, y su variado programa de actividades convoca a asistentes de todas las edades. En el cancionero popular encontramos los siguientes versos, cuyos resabios apuntan a la feria tendillana: “No compres mula en Tendilla/ni en Brihuega compres paño/ni te cases en Cifuentes/ni amistes en Marchamalo/La mula te saldrá falsa/el paño te saldrá malo/la mujer te saldrá puta/y los amigos contrarios”, así como “Mula de Tendilla, amistad de Alcocer y mujer de Hita, no me los des”.

NR. La feria de las Mercaderías de Tendilla, se va a celebrar el fin de semana del 25-26 y 27 de febrero de 2022