Cartas: ¿Privilegios para escuchar la conferencia sobre Driebes?

Esta tarde me he acercado hasta el Palacio del Infantado para asistir, como en otras muchas ocasiones, a una de las magníficas conferencias que se programan en su salón de actos. Pero la de esta tarde era especial, se presentaba un importantísimo hallazgo arqueológico en la provincia de Guadalajara, nada menos que una nueva ciudad romana localizada en el pueblo de Driebes.

Al llegar a la entrada del palacio me encuentro con una situación caótica, hay una gran cantidad de personas a las que no se les permite subir la escalera para acceder al salón donde va a tener lugar la conferencia. Un vigilante de seguridad me dice que el aforo está completo, que no se puede entrar y que la conferencia se repetirá el próximo martes.

Ya estaba resignada a volver la semana que viene, cuando aparece Jesús Alique –ex Alcalde de Guadalajara- y, para mi sorpresa, resulta que al él si le dejan pasar, le digo al vigilante que por qué pasa este señor, a lo que me contesta que le ha dicho que tiene una reserva, le pregunto si hay reservas y me dice que arriba tienen una lista, entonces le digo que quiero subir a comprobar esa lista y él no me impide el paso. Al subir las escaleras descubro que no hay ninguna lista.

Pregunto en voz alta si los políticos tienen privilegios para entrar, en ese momento Jesús Alique sale del salón seguido de dos cargos de la Junta de CLM, diciéndome que a él tampoco le han dejado entrar y que él no es político, que es funcionario –lo que no deja de resultar curioso para alguien que ha sido Presidente de la Diputación, Alcalde de Guadalajara y Senador, además de Secretario General del PSOE en Guadalajara-, repite insistentemente que no es político, entonces le pregunto que si ser político es un insulto, y me replica indignado que “eres tonta, tonta” y “me estas tocando los cojones”. Yo, estupefacta ante estos insultos, le contesto que si quiere que los grabe, entonces su acompañantes se lo llevan a un lado, mientras él sigue insistiendo en que “me estas tocando los cojones”.

Ante estos hechos, me he sentido ofendida, humillada y defraudada, porque no esperaba, ni como ciudadana, ni como mujer, tal pérdida de papeles ni una reacción de tanta violencia verbal y con tal grado de tinte machista. Me siento triste de que, aunque precisamente ayer celebráramos el Día de la Mujer, se sigan dando estos comportamientos de rancio machismo por parte de quienes han ocupado cargos públicos de tal relevancia.

LYDIA BORLAN PAZOS