En Tamajón la navidad llega al umbral del Ocejón

tamajon_nacidad_ronda2016El mismo día que comenzaban a salir los agalloneros de ronda, hace ya algunos años, el día de la Purísima, el 8 de diciembre, se celebraba ayer el IV Certamen de Villancicos de Tamajón. El alcalde del municipio, Eugenio Esteban, se encargó de pregonarlo, dándole además la bienvenida a todas las rondas y grupos de villancicos que iban a cantar, provenientes de Hita, Humanes, Cantalojas, Atienza y Atanzón, respectivamente. Entre público y cantantes, el número de asistentes se elevaba hasta las quinientas personas.

En el pregón, Esteban afirmó que “lo intangible lo más importante de los pueblos” porque de ahí dimanan las costumbres, el folklore, los oficios, y los conceptos que componen el medio rural. “La industrialización de los años 50 y 60 del siglo pasado, comenzó por arrastrar una población, con unos medios muy precarios para su bienestar, en busca de otros trabajos que hicieran más fácil la supervivencia, pues entonces era de sobrevivir de lo que se trataba”. El regidor reflexionó a continuación, públicamente, sobre si hubiera sido mejor distribuir aquellas industrias en más territorios. “No se pensó en el impacto ambiental tan negativo que iba a suponer el abandono del campo y la desertización demográfica del medio”. Esteban subrayó los esfuerzos que hacen las distintas administraciones para evitar la despoblación, aunque el resultado no sea el deseado. “Yo diría que, por muchos esfuerzos que hagamos, si éstos son desatinados, servirán para poco. Por eso es muy importante conservar también en nuestro medio aquel folklore y aquella cultura que nació de lo inmaterial, de las mentes de nuestros antepasados, y se convirtió en instrumentos y coplas para cantar su vida diaria”. “Que lo intangible permanezca, que ya pasará algún tren cargado de recursos y buena puntería para que los habitantes de éste medio vivan con las mismas condiciones que disponen los de la ciudad. Sanidad y Bienestar Social, Educación, Comunicaciones y Transportes, entre otras. No podemos perder la esperanza, ni pensar que va a ser fácil. Los milagros no existen, a excepción del que estamos celebrando ahora: la navidad”, concluyó.

Correspondió abrir el certamen a la Ronda de Hita. Tomó su relevo una de las agrupaciones musicales más veteranas de Guadalajara, la Coral Penafora de Humanes, que tiene una larga historia, según relataba su presidenta, Rosalía Martínez. Espectacular, como cada año, fue la actuación de los Cencerrones. Ataviados con sus impresionantes corralas de cencerros a la espalda, vestidos con sus trajes de pana, manta, albarcas y calcetines de lana, y sus boinas, dejaron patente, ante el público, que abarrotaba el salón de actos de Tamajón, el pasado ganadero de su localidad de origen. El Grupo de Tradiciones de Atienza, tiene una historia parecida, pero es de más reciente creación.

Cerró, con su energía positiva que saben contagiar a todo el mundo, la Real Zambombada de Atanzón.