Anulada por tercera vez la adjudicación del servicio provincial de recogida de basuras

El Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales, dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, ha anulado por tercera vez consecutiva la adjudicación del servicio provincial de recogida de residuos promovido por el PP en la Diputación de Guadalajara. Al igual que las dos ocasiones anteriores, estima el recurso presentado por una de las empresas licitadoras y ordena volver atrás para motivar adecuadamente la valoración de las ofertas presentadas.

El portavoz del Grupo Socialista, Julio García, ha calificado de “surrealista” esta situación, porque las valoraciones deberían estar suficientemente motivadas desde el primer momento. “Que sean necesarias tres resoluciones judiciales exigiendo que se justifiquen las puntuaciones que sirven de base a la adjudicación, resulta escandaloso y es una muestra más del desastre que está siendo este proyecto”, ha afirmado.

Según ha recordado García, fue “desastroso” desde el primer momento al plantearse de espaldas al resto de grupos que formaban parte de la Corporación y, sobre todo, de espaldas a los ayuntamientos y a las mancomunidades que están prestando ahora el servicio de recogida de basuras. Igualmente “desastrosa y errática” ha sido después su tramitación, con sucesivos anuncios contradictorios entre sí y quejas continuas por parte de los ayuntamientos ante la falta de información y de transparencia. En consecuencia, tan solo una treintena de ayuntamientos de los casi 300 que hay en la provincia decidieron adherirse desde el primer momento a un servicio que apenas llegaría al 3% de la población de Guadalajara. Incluso, algunos fueron incluidos contra su voluntad. Por último, no puede menos que calificarse también de “desastroso” el proceso de adjudicación, que ya acumula tres anulaciones.

Proyecto atascado
“No conozco un caso igual. A finales de 2014 ya se anunció con amplio despliegue de medios que empezaba la prestación del servicio. Sin embargo, la realidad es que ha pasado más de un año y sigue atascado, mientas que los pueblos no saben a qué atenerse ni tienen a nadie que les informe”, ha denunciado García.

Desde el primer momento, el Grupo Socialista ha venido alertando de las enormes debilidades que presentaba el proyecto. Por ejemplo, ningún técnico de la Diputación se responsabilizaba de los estudios económicos que fijaban los costes del servicio, tampoco se tenían en cuenta los costes derivados de la salida de los municipios de las mancomunidades, ni de la subrogación del personal, y hasta se incluía a ayuntamientos contra su voluntad.

Con todas esas carencias, fue adjudicado por primera vez hace ahora un año y recurrido por la empresa puntuada en segundo lugar. En el mes de abril, el Tribunal de Recursos Contractuales anuló por primera vez la adjudicación al considerar que la asignación de puntuaciones a los licitadores no estaba suficientemente motivada. Sin apenas cumplir esa exigencia, se volvió a adjudicar el pasado mes de septiembre, dando lugar a un nuevo recurso y la consiguiente anulación por los mismos motivos.

En diciembre se produjo una tercera adjudicación, y la historia ha vuelto a repetirse con una nueva resolución judicial que aún no considera suficientemente explicados los criterios seguidos para asignar puntuaciones en aspectos tan clave para el funcionamiento del servicio como su diseño, organización e implantación o la metodología y sistemas a emplear en la recogida.

No es normal
“Esto no es normal, y la respuesta a esta situación no puede ser una nueva adjudicación apresurada que probablemente acabe del mismo modo, en los tribunales. Esta situación es insoportable. Tienen empantanados a los pueblos y a la provincia con este servicio y no pueden seguir adelante a la desesperada, guiados solo por la obstinación o la soberbia. Los pocos pueblos que habían confiado en él no saben a qué atenerse, y tampoco las mancomunidades que llevan a cabo cada día la recogida de residuos. Es un disparate, y los pueblos de Guadalajara no merecen este trato”, ha aseverado el portavoz socialista.

Por eso, ha vuelto a pedir que se busque una solución desde el diálogo con las empresas y, sobre todo, “partiendo de cero” con los ayuntamientos para restablecer la confianza que perdieron a base de trabajar a sus espaldas y a fuerza de negarles la participación y la información. “No se puede poner en marcha un proyecto para los pueblos de la provincia sin contar con ellos, porque estará condenado al fracaso, como el Equipo de Gobierno del PP está demostrando con este proyecto”, ha concluido.