Azuqueca mantiene el programa de becas de comedor escolar durante las vacaciones de Navidad

Los menús se repartirán en el CEIP La Paloma para consumirlos en casa los días 23, 28, 29 y 30 de diciembre y 4, 5 y 7 de enero

De cara a las vacaciones escolares de Navidad, que abarcan del 23 de diciembre al 7 de enero, ambos inclusive, en Azuqueca se dará continuidad al programa de becas de comedor durante este descanso. El Ayuntamiento y la Junta de Comunidades -a través de la consejería de Educación- han firmado un convenio con en el que el gobierno regional se compromete a abonar las subvenciones para un total de 470 alumnos del segundo ciclo de Infantil y Primaria. Por su parte el Ayuntamiento se hace cargo de la organización del servicio durante estos días y asume los gastos derivados, incluyendo los trabajos de desinfección y limpieza en el centro de recogida, el CEIP La Paloma. “Otros años, los menús se servían a los niños y niñas de las familias con menos recursos a través del campamento urbano municipal, pero, en esta ocasión, no podemos organizar esta actividad en cumplimiento de las medidas fijadas por la Consejería de Sanidad para la prevención del contagio por COVID-19”, explica la concejala de Educación Global, Susana Santiago, quien añade que “como alternativa, la comida se podrá recoger para su consumo en el domicilio”.

De este modo, los días 23, 28, 29 y 30 de diciembre, así como el 4, 5 y 7 de enero de 2021, las familias que cuentan con una beca de comedor escolar podrán acudir a mediodía a las instalaciones del CEIP La Paloma y retirar los menús, que se envasarán adecuadamente para su transporte y posterior consumo.

La edil recuerda que este programa de becas se dirige al alumnado de segundo ciclo de Educación Infantil y de Primaria en situación o riesgo de vulnerabilidad. La Junta de Comunidades cede los espacios y subvenciona la comida -en un cien por cien o al cincuenta por ciento, según cada caso-. El Ayuntamiento, por su parte, gestiona la apertura y el cierre de las instalaciones, supervisa el cumplimiento de las normas de aforo, desinfección, prevención y acondicionamiento marcadas para evitar la propagación y el contagio por COVID-19. Asimismo, aporta el personal necesario para la apertura, limpieza y vigilancia y asume los gastos -luz, agua, limpieza y desinfección, entre otros- derivados de la prestación del servicio.