Pastrana es una “escapada perfecta” de la mano de los Príncipes de Éboli

Lo hizo en el Día de Guadalajara en FITUR, presentando varias iniciativas turísticas de la ciudad, como son las visitas teatralizadas que lleva a cabo los primeros sábados de cada mes la Asociación de Damas y Caballeros, o el Festival Ducal, declarado de Interés Turístico Provincial

El mismísimo Ruy Gómez de Silva, Príncipe de Eboli y Duque de Pastrana, Grande de España, se presentó ayer en FITUR, en pleno siglo XXI pero procedente del XVI, para representar a la Villa Ducal “que tantas alegrías nos dio a mi esposa, la Princesa de Eboli, Ana de Mendoza y de la Cerda y a mí, y que aún hoy nos sigue dando, gracias a que sus gentes nobles y sencillas y trabajadoras han sabido mantener la esencia de esta nuestra noble Villa Ducal”, aseguró.

El príncipe de Eboli calificó la del viajero a Pastrana como “una escapada perfecta”, y aún más en este año, en el que se cumplen los 450 del nombramiento de la localidad como villa Ducal, que fuera otorgado por su católica majestad, el rey Felipe II, mediante cédula real el día 20 de diciembre de 1569. Fue aquel el año más importante de la historia local, pues acontecieron en él muchos hechos históricos.

Ayer, en FITUR, Ruy Gómez de Silva aseguró a propios y extraños que la Villa Ducal de Pastrana “hace gala hoy del legado que dejamos y sigue luchando por mantener nuestra historia, su historia, hoy más real que nunca”. Para ello, gentes de todas las edades, condición y credos se han unido para integrar al visitante en las vivencias en Pastrana. Gracias a las visitas teatralizadas, que se realizan el primer sábado de cada mes, y al Festival Ducal de julio, los visitantes conocen las estancias del Palacio de Covarrubias, galerías, habitaciones y salones, trasladándoles a otra época, “nuestra época”, aseguró. A lo largo de las catorce escenas de que constan estas visitas teatralizadas, los turistas viven la historia en el que se escribió esa misma historia, bajo los impresionantes artesonados que lograron sobrevivir a los siglos. Así, son testigos de los festejos en honor a la madre Teresa de Jesús a su llegada a la villa; entre sus galerías sienten las rencillas entre la Santa Andariega y la Princesa de Eboli; entre sus muros conocen el desgarrador cautiverio que Ana de Mendoza y de la Cerda vivió injustamente; y en su oratorio rememoran la imposición de hábitos de los primeros carmelitas descalzos del cerro de San Pedro, rodeados de sus zócalos de azulejos toledanos.

En cualquier caso, Pastrana es, en cualquier momento del año, una escapada perfecta que refleja en sus monumentos y en sus gentes, por ejemplo, el paso de los calatravos. Sus calles empedradas tienen aroma a vivencias de nobles y lacayos, de corte y conventos, sonido a niños cantores del colegio de San buenaventura, reflejan el asombro por su Colegiata y el Museo de Tapices, y son inmejorable escenario para los recuerdos que la Princesa de Eboli, la Madre Teresa, y el propio Ruy Gómez de Silva, dejaron a sus gentes.

“Pastrana es historia sobre la historia que sorprende día a día y que descubre y protege su Festival Ducal, su historia aún viva. Visiten la villa ducal de Pastrana en sus 450 años de ducado, en sus 450 años de las fundaciones carmelitas, y seguro que en algún rincón de la villa, nos encontraremos”, terminó Ruy Gómez de Silva en FITUR.

Asimismo, en FITUR, la Asociación de Damas y Caballeros de Pastrana dio buena muestra de los bailes renacentistas recuperados en los que trabajan anualmente, interpretándolos con la exquisita selección de trajes de época, absolutamente fieles a la realidad, con los que recrean, cada año una efeméride en el Festival Ducal de julio. A buen seguro que este año, cuando se cumplen 450 años de las fundaciones pastraneras y del nacimiento de la villa ducal, ese será su argumento principal. V. Además, también se revivieron algunas escenas de las que se representan en el Festival Ducal.

El alcalde de Pastrana, Ignacio Ranera, dio las gracias “a los pastraneros, que son como siempre digo, los mejores embajadores de nuestra tierra”, por su labor, también en FITUR, y también especialmente a Javier Gumiel, por su interpretación de Ruy Gómez de Silva.