Transitar la pista entre Majaelrayo y Cantalojas

El río Lillas, afluente del Sorbe, en las cercanías del municipio de Cantalojas.
El río Lillas, afluente del Sorbe, en las cercanías del municipio de Cantalojas.

Guadalajara está repleta de rutas senderistas, a caballo, en bicicleta o en coche. Sólo hay que buscarlas, coger un mapa y salir a recorrerlas. Una de las rutas especialmente recomendable entre mayo y principios de otoño consiste en transitar por la pista que nos lleva desde Majaelrayo hasta el pueblo de Cantalojas, en la Sierra Norte de la provincia.

Son casi 25 kilómetros de pista, en su mayor parte con un piso en buenas condiciones. En invierno, en cambio, la pista se embarra por las lluvias y las nieves invernales y no es aconsejable acceder en coche por los efectos de los rigores del clima. Conviene, por tanto, en esa época extremar las precauciones o, directamente, elegir otro itinerario salvo que se disponga de un vehículo adecuado. Además, cabe recordar que se trata de una vía de montaña, de arena, con animales sueltos que en cualquier momento pueden cruzarse.

La pista es de tierra blanquecina y parte desde Majaelrayo, a 1.200 metros de altitud. A la derecha dejamos la mole pétrea del Ocejón, un poco más al norte se nos queda la cima del Campachuelo y el collado por el que viene la “Senda del cartero” y que une Majaelrayo con Valverde de los Arroyos. Nada más partir la pista tiene sentido ascendente y atravesamos el arroyo del Caño de los Sotorraños. Poco después, arribamos a las Lomas de Paraellas, donde a unos dos kilómetros de la salida confluye una pista de conexión que une nuestra pista con la que va al Puerto de la Quesera.

Tras continuar el ascenso, el viajero alcanza el paraje de la Cabeza del Rocín, a 1.568 metros de altitud, para luego hacer un rápido y vertiginoso descenso a un puente que cruza el río Sonsaz. Muy cerca del puente, y una vez atravesado el río, surge una pequeña área de descanso con algunas mesas que bien puede ser un lugar para deleitarnos con el paisaje o fotografiar el entorno. Esta zona pertenece a la extinta Reserva Nacional de Caza de Sonsaz, creada para proteger cinegéticamente las especies más amenazadas y hoy integrada en el Parque Natural de la Sierra Norte de Guadalajara.

Nuestra pista zigzaguea hasta alcanzar la Loma del Puerto, a 1.650 metros de altitud, cota máxima por la que vamos a transitar. Desde aquí, aparece una nueva vertiginosa bajada con muchas curvas. Conviene extremar la precaución. Después de atravesar el arroyo del río Mediano, tributario del río de la Hoz, una última subida encamina ya la pista hacia el municipio de Cantalojas.

En todo caso, antes el viajero deberá descender hasta las cercanías de la unión del río Lillas con el de la Hoz. Se trata de un paraje de extraordinaria belleza. Poco antes de cruzar ambos, nos desviarnos a la derecha para acercarnos al área recreativa de la Venta, siendo éste un buen lugar para pasar un día de campo y darse un chapuzón en el río.

La ruta continúa hasta llegar hasta el centro de información del Hayedo de Tejera Negra. Concluye a dos kilómetros de este punto, ya en Cantalojas, un pueblo de gran personalidad serrana que dispone de un remozado hostal en el que poder comer y dormir.