Se vende un pueblo: Villaescusa de Palositos

XIII Marcha de la Flores.- Villaescusa de Palositos

Hace unos días saltaba la noticia. Y, aunque a primera vista puede parecer una fake news, se trata de algo muy real, tangible. Se vende gran parte de la finca en la que se ubica Villaescusa de Palositos. Y el precio de salida son 2.700.000 euros. Ni más ni menos. De esta forma aparecía publicado en un conocido portal de internet, especializado en alquileres y adquisiciones de propiedades.

Villaescusa de Palositos desde el cielo según Google Maps
Villaescusa de Palositos desde el cielo según Google Maps

El anuncio califica el emplazamiento como “finca agrícola y ganadera, con fácil acceso desde Madrid”. “Disfrutarás de un terreno de 2.740.000 metros cuadrados, distribuido para ganadería, agricultura, picadero, cuatro casas rústicas construidas alrededor de una plaza empedrada de 500 metros cuadrados, agua propia de manantial e instalaciones impecables”, se añade en la publicidad.

Pero las alabanzas no quedan aquí. “Imagina despertar en esta maravillosa finca, donde la tranquilidad hace que tu vida sea placentera y de calidad, teniendo la posibilidad de cultivar en un terreno de 110 hectáreas, o bien contemplar a tu ganadería pastando en un terreno de 16 hectáreas dedicado para ello exclusivamente”, se explica. “También podrás darte un paseo a caballo, desde el picadero propio, por las 148 hectáreas de monte de tu propiedad, mientras preparas un fin de semana maravilloso con los amigos para ir de caza”, se complementa.

XII Marcha de las Flores:- Villaescusa de Palositos

Sin embargo, éste es el segundo intento de venta de la finca habido en los últimos tiempos. Hace unos meses, en otro portal especializado en el traspaso de propiedades, ya aparecía Villaescusa de Palositos. Pero, en esta ocasión, a un precio más «asequible». A tan sólo 2.500.000 euros. Es decir, 200.000 más barato que la nueva oferta… “Se vende finca agrícola ganadera de 274 hectáreas, de las cuales 110 son de labor, 16 de pastos y 147 de monte”, se narraba en el anuncio. “Está ubicada en la provincia de Guadalajara. Tiene autonomía de luz y de agua, con diferentes edificaciones”, se aseguraba.

En cualquier caso, estas publicidades ya han generado las primeras reacciones. “Entiendo que, dentro de los términos legales, cada uno es libre de hacer con su patrimonio lo que considere oportuno. Y, en este caso, no puede ser de otra manera”, indica Marcos Guijarro, presidente de la asociación de Amigos de Villaescusa de Palositos. “Otra cosa sería que el dueño pretendiese enajenar lo que no es suyo (caminos, vías pecuarias, calles, plazas, edificios públicos y privados…), en cuyo caso habría que tomar cartas en el asunto y recordarle donde están los límites”, subraya.

Desde la Asociación de Guadalajara de Amigos del Camino de Santiago también se muestran muy claros al respecto. De hecho, por el lugar discurre una ruta jacobea, conocida como «Camino de la Lana». “Si la venta representara el desbloqueo de todas las vías públicas y su libre tránsito, así como la solución para el resto de problemas, la veríamos con buenos ojos”, explica el presidente de la mencionada entidad, Juan José Hita.

XII Marcha de las Flores:- Villaescusa de Palositos

Posibles soluciones
Sin embargo, y a pesar de estos intentos de traspaso, actualmente persisten los problemas que aquejan a Villaescusa de Palositos. Los accesos a la finca siguen siendo complicados. A pesar de que en su interior existen caminos públicos e infraestructuras que –como el cementerio o la iglesia parroquial, protegida desde 2012– deberían poder ser visitadas por la ciudadanía.

– Entonces, ¿cómo se podría remediar esta situación? –espeta el periodista.

– Muy sencillo: obligando al propietario a respetar la libre circulación de cualquier persona que desee transitar por ellos –Marcos Guijarro–. También habría que instarle a restaurar el trazado del núcleo urbano tal y como lo encontró cuando lo adquirió.

“Actualmente, existe una hoja de ruta, con un plan ordenado de actuaciones consensuado entre los miembros de la plataforma de Villaescusa de Palositos”, añade Juan José Hita. “Además, queremos concertar reuniones con todas las partes afectadas, para dar una solución satisfactoria. Eso sí, siempre por la vía pacífica, diplomática y –si nos viéramos en la obligación– también por la judicial”, asegura Hita.

– ¿Qué papel deberían jugar las administraciones competentes en este problema? –lanza el cronista.

– Solo es necesario voluntad política para hacer cumplir la legislación vigente –subraya Marcos Guijarro–. Nadie tiene derecho a usurpar o destruir caminos, vías pecuarias, calles, plazas, fuentes, edificios o espacios públicos.

Un problema que viene de lejos
A pesar de las últimas noticias, el asunto de Villaescusa tiene un largo recorrido a sus espaldas. Esta localidad se encuentra deshabitada desde la década de 1970, debido al éxodo rural. Llegó a ser un municipio independiente, pero las edificaciones que quedaron en pie se incorporaron –en lo político– al término de Peralveche. Además, y con el discurrir de los tiempos, los terrenos del antiguo pueblo cayeron en manos privadas, traspasándose entre diferentes propietarios a lo largo de los años.

“Para nosotros, la problemática comenzó el 29 de abril de 2006, cuando con motivo de la primera Marcha de las Flores, nos dirigimos a Villaescusa y nos encontramos con el camino público cortado por unas puertas metálicas. Y, tras ellas, varios miembros de la Benemérita impidiéndonos el paso y protegiendo los intereses del propietario parcial, como si fuera el único dueño de todo lo allí contenido”, denuncia Marcos Guijarro.

Desde entonces, se ha realizado una protesta anual, en la que se exige el libre paso por los caminos públicos, así como el acceso al cementerio y la consolidación de la antigua iglesia de la Asunción. Se trata del templo parroquial de la localidad, definido por su estilo románico tardío.

En la actualidad se encuentra en ruinas, a pesar de haber sido declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2012.

XII Marcha de las Flores:- Villaescusa de Palositos

Precisamente, la situación del monumento es uno de los puntos más polémicos. “En este caso, cualquier solución que se ha ofrecido por parte de las administraciones, lejos de mejorar la situación, la ha empeorado, acelerando su constante deterioro”, denuncia Juan José Hita. “Un ejemplo fue la primera decisión que tomaron, consistente en desmontar el tejado del santuario, exponiendo los restos a los factores meteorológicos adversos, enemigos número uno de cualquier construcción”, añade.

“Por tratarse de un BIC, el propietario de la iglesia –es decir, la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara– está obligado por ley a conservarlo en las debidas condiciones, para evitar su deterioro”, complementa Marcos Guijarro. “Pero hasta el día de hoy, el Obispado no se conforma con no cumplir con su responsabilidad, sino que impide que fructifique cualquier iniciativa por parte de las administraciones públicas”, añade. “Los poderes públicos tampoco han puesto mucho empeño en el asunto, porque si así fuera, los fondos que asignan para conservar el patrimonio irían –sí o sí– a la restauración de este complejo”, confirma Guijarro.

Por tanto, la nueva noticia de la venta de la finca es un paso más en el negativo devenir que ha afectado a Villaescusa de Palositos. Finalmente, ¿se conseguirá vender el terreno? ¿Los nuevos propietarios serán más sensibles a las reclamaciones de los antiguos vecinos? ¿Se alcanzará una solución satisfactoria a la problemática? Es imposible saberlo. Esperemos que no se cumpla aquel aforismo que señala que «la historia se repite»…