Brihuega, una villa histórica en plena Alcarria

 

Brihuega panorámica
Brihuega panorámica

Brihuega, la villa declarada en 1973 como conjunto Histórico Artístico, ha sabido salvaguardar su pasado y sus monumentos y que hoy muestran al turista con verdadero orgullo y pasión.

Por Brihuega pasó el joven Cela en 1946 deleitándose de esta ciudad y conociendo a su amigo Julio Vacas “Portillo”, el que le hizo de “cicerone” por todos los rincones de la villa. Y este pasado año, y lo que aún resta del presente, la villa se esfuerza en aprovechar el año Cela para mostraral mundo su historias, su pasado, su presente y su futuro. Pero Brihuega también ha sabido aprovechar el último año que fue dedicado al tercer centenario del fallecimiento del músico universal briocense Sebastián Durón.

El viajero llega a Brihuega y tiene mucho para conocer y deleitarse y proponemos un breve apunte de lo que puede conocer, aunque lo mejor de todo es ir primero a la oficina de turismo que está situada en la antigua Real Cárcel de Carlos III en la Plaza del Coso, donde seguramente le informaran de todo lo necesario y también, seguramente, podrá apuntarse a cualquiera de las visitas guiadas que desde allí se organizan.

brihuega_jardines190416Una visita obligada es conocer la Real Fábrica de Paños, o lo que queda de ella. En 1750 el rey Fernando VI funda la Real Fábrica de Paños de Brihuega, como sucursal de la Fábrica de Guadalajara.

La fábrica se construirá a lo largo de los primeros años de ese decenio, dentro del recinto amurallado de la villa y en el lugar que ocupaba la ermita de Santa Lucía (en el extremo este del núcleo de Brihuega).

Constituye uno de los ejemplos de la arquitectura industrial del siglo XVIII en España. Tras un esplendor de 1768 a 1790, durante el cual fue una de las instalaciones industriales más prestigiosas del país, fue saqueada en la Guerra de la Independencia y usado su edificio como cuartel francés. Funciona en 1814 y en 1840 pasa a manos privadas siguiendo la fabricación hasta la Guerra Civil. Los jardines se levantaron después de 1840 con un bello trazado geométrico formando una malla intrincada de estructura casi barroca.

Siguiendo con la arquitectura civil destaca la Real Cárcel de Carlos III que se encuentra situada en la Plaza del Coso y que fue construida en 1781, durante el reinado de Carlos III. El edificio fue utilizado como escuela y academia de música y en 1984 se destinó a biblioteca y actualmente alberga la Oficina de Turismo.

Otro edificio que destaca es La Casona de los Gómez, una casa nobiliaria del siglo XVIII de renacentista, con escudos nobiliarios en la fachada a ambos lados de los balcones.
En la Plaza del Coso se encuentra el Ayuntamiento. El edificio actual fue inaugurado en 1975 y sustituyó al antiguo edificio realizado por Ventura Rodríguez, que databa de 1797.

brihuega
Brihuega

Frente al ayuntamiento están las Cuevas Árabes. Son un laberinto de galerías y túneles que recorren todo el subsuelo briocense, con una longitud aproximada de ocho kilómetros. Utilizadas en épocas de asedio, a través de ellas tenían una vía de escape al exterior de las murallas. Cuenta con una temperatura constante de 12ºc durante todo el año, de ahí que se utilizaran como almacén de víveres y alimentos en épocas pasadas.

No se concibe Brihuega sin su afición taurina en la que destaca sin lugar a dudas el célebre encierro, el segundo más antiguo de España y declarado Fiesta de Interés Turístico Regional y que se celebra en la tarde del 16 de agosto, en plenas fiestas dedicadas a la Virgen de la Peña. Y gracias a esta afición taurina, la villa cuenta con una magnífica plaza de toros construida en 1965, y conocida con el nombre de “la Muralla”, puesto que está al lado de la misma.

Fue Don Jesús Ruiz Pastor, importante promotor de la villa durante los años 60 y 70, quien decide que Brihuega debe contar con una plaza de toros estable dada la tradición taurina del pueblo. Es la plaza más grande de la provincia de Guadalajara, cuenta con cerca de 8.000 localidades. Como dato curioso hay que destacar que esta plaza fue construida en tan solo 200 días y fue inaugurada el 12 de junio de 1965. En su inauguración estuvieron presentes los diestros: Paco Camino, Andrés Hernando y El Cordobés.

Cerca del Parque de María Cristina, verdadero pulmón verde de la localidad, se encuentra el Rollo o Picota. Construido en el S. XVI de granito tallado, consta de un fuste alto y cilíndrico, apoyado sobre un bloque también de granito.

brihuega_fitur2013a_290113En cuanto a la arquitectura religiosa destaca la Iglesia de San Felipe. Construida en el S. XIII es una de las construcciones más bellas de Brihuega con un estilo románico de transición al gótico. El templo es de tres naves con bóvedas de crucería. La central remata en largo presbiterio recto con bóveda de cañón apuntado y ábside semicircular con bóveda de cuarto de esfera. En el muro meridional hay una bella portada de cinco arquivoltas apuntadas, con guardapolvos de puntas de diamante.

etapa03_01_brihuega_sanmiguelPor otro lado la Iglesia de San Miguel fue construida en la primera mitad del siglo XIII. Situada en la zona sureste de Brihuega, su ubicación responde a la voluntad urbanística del arzobispo Ximénez de Rada, que decide levantar dos templos cristianos en barrios de nueva creación: los de San Felipe y de San Miguel. El estilo que inspiró este templo estaba netamente en conexión con el más puro mudéjar toledano. Al día de hoy está dedicada a centro cultural donde se representa obras de teatro o conciertos musicales.

La iglesia de Santa María de la Peña se encuentra situada junto al Castillo de la Piedra Bermeja. Su emplazamiento es uno de los lugares más románticos de toda la Villa, rodeado de frondosos árboles y en un entorno natural y patrimonial inolvidable.

brihuega041016Construida a principios del S. XIII por el Arzobispo D. Rodrigo Ximénez de Rada, es uno de los cinco templos cristianos con los que contó Brihuega. Se trata de una iglesia de tres naves con tres tramos. Cobijada bajo un porche moderno, se encuentra una preciosa puerta de transición del románico al gótico con cuatro arquivoltas apuntadas y tímpano rebajado con dos arcos apuntados simétricos con tres óculos, siendo el central un pequeño rosetón. En su interior de conserva la imagen de la Patrona de la localidad: la Virgen de la Peña.

Cerca del Prado de Santa María se encuentra el Convento de San José, antiguo convento de franciscanos fundado por Juan de Molina hacia 1619; es unos edificios anejos a la Muralla.
Tras la desamortización de Mendizábal, en su edificio se instaló en 1835 el hospital de la villa, además de ser cárcel en sus bajos, colegio y escuela taller. En la actualidad alberga la Sala de Exposiciones y el primer Museo Mundial de Miniaturas del Profesor Max.

brihuega_fitur2013b_290113No podemos dejar de visitar y conocer el Castillo de la Piedra Bermeja que se asienta sobre una eminencia rocosa, en el extremo sur de la población. Sobre el primitivo fortín de los árabes, se añadieron estancias en el siglo XII, de estilo románico, y posteriormente en el XIII le construyeron la capilla de tono gótico de transición.

Nos encontramos con que, entrando por la puerta que existe junto a la iglesia de Santa María, el núcleo central del castillo consta de un espacio central, el más elevado, en el que hoy aparecen unas construcciones que debieron pertenecer a salones del palacio. Delante, un amplio espacio abierto, restos de otras construcciones, sirve de cementerio. Adosado a este primitivo núcleo constructivo, existe un conjunto de edificaciones al norte, consistentes en una larga nave cubierta de bóveda de cañón, y que hoy se denomina y utiliza como capilla de la Vera Cruz, a la que se entra por una sencilla puerta desde el prado de Santa María. Desde el nivel superior se accede a la que fue capilla del castillo, y que es hoy la pieza artística más singular que en él se conserva.

Es un espacio de dimensiones cuadradas, planta poligonal, con cinco lados, y que constituye un elegante espacio de arquitectura gótica inicial, obra de los primeros años del siglo XIII, tiene sus cubiertas formadas por arquerías apuntadas, ojivales, y en el ábside se abren tres ventanales esbeltos y apuntados, mostrando ménsulas de decoración vegetal, y claves en las bóvedas.

La villa está amurallada, aunque hoy quedan algunos lienzos desminados. Para acceder a la ciudad briocense han quedado en pie varias puertas, destaca el Arco del Cazagón. Fue la puerta más importante de la Villa de Brihuega. Se sitúa al Sur, como acceso al camino que se dirige al Tajuña primero y al Tajo después. De esta forma, conectaba con el camino que se dirigía a Toledo.

Se compone de un doble arco, cuya altura máxima es de 10 metros y su anchura de 3.30 metros. Está toda labrada en piedra de toba, muy blanda a la hora de tallarla, pero de endurecimiento progresivo con el paso del tiempo.

El Arco de la Guía. Este arco es el que da acceso al Prado de Santa María. Fue construido en el siglo XIX por el General Hugo (padre del escritor Víctor Hugo) durante la Guerra de la Independencia (1808 -1814), con el objetivo de abrir un hueco por el recinto amurallado para conquistar el castillo de la Piedra Bermeja.
Con el paso del tiempo se configura como una puerta monumental.

La Puerta de la Cadena se abre al norte de la villa de Brihuega, siendo denominada en algunos documentos antiguos como Puerta de Valdeatienza, ya que hasta allí llegaba el camino que se dirigía hacia la villa de Atienza.

Está formada por un sencillo arco de medio punto, sobre el que actualmente podemos ver varias placas conmemorativas del asalto a la Villa en 1710 durante la Guerra de Sucesión, en el marco de la Batalla de Brihuega-Villaviciosa que tuvo lugar en estas tierras alcarreñas.

Puerta del juego de pelota o Puerta Medieval de Santa María. Se ubica en el sistema defensivo de la parte alta de la Villa, en la muralla que rodea el Prado de Santa María. Se trata de una puerta con doble arco apuntado de estilo gótico, y data de la segunda mitad del siglo XIII, apreciándose marcas de canteros entre las que se encuentra la media luna. Presenta excelentes sillares de arenisca y tobas calcáreas, muy regulares y cuidadas.

La ruta de las fuentes bien merece un paseo por la villa y sus alrededores: destacamos las fuentes del Coso, que jalonan la entrada a la Plaza del Coso desde la Calle Mayor. Fueron mandadas construir por el monarca Carlos III, junto con la Real Cárcel.

Fuente de Santa María. Es una de las fuentes más bonitas de Brihuega, ubicada en un lugar especial: el Prado de Santa María. Fue reubicada al lugar actual en los años 60, ya que la fuente original se localizaba adosada a la muralla.

La fuente Blanquina o de los doce caños. La Fuente de los “Doce Caños” también es conocida como la “Fuente Blanquina”. Es la de mayor tamaño y una de las señas de identidad de Brihuega, sirve de soporte al lavadero municipal. Cuenta con un total de veinticuatro caños. Doce en la parte frontal y otros doce son los que abastecen el lavadero. El lavadero consta de tres grandes pilas rectangulares: una primera para el enjabonado de la ropa, otra para el aclarado y una última de menor tamaño para el fregado de los cacharros de cocina.
Con la Guerra Civil (1936-1939) la fuente prácticamente quedó destruida, resurgiendo de sus cenizas hacia 1940 con su reconstrucción.

En la villa hay más fuentes: la fuente del Paseo de la Fábrica, la Fuentecilla, la Fuente de Santo Tomás, la de San Juan, la Fuente del Tinte o la del Hisopo sirvieron de abastecimiento de agua en los hogares, donde las mujeres iban a llenar sus cántaros hasta que a mediados del siglo XX en que Brihuega dispuso de agua corriente en las casas. Además de las fuentes mencionadas y descritas ubicadas intramuros, el visitante puede encontrar en los alrededores de la villa otras muchas. Por ejemplo, en el Camino de Toledo la fuente del Cubillo, la del Piojo y la de Santa Ana; o en el Camino Bajo de Villaviciosa la fuente de la Princesa, la de San Gil y la de Fuencaliente.
Por ultimo estacar que Brihuega tiene diversos hoteles y una rica gastronomía para que el viajero descanse y disfrute de los productos briocenses.