Corona de Macizos y Sierras
capa de hayedos y pinares
tu eres la bella reina
entre ermitas y altares.
Recorro el camino de la vida
como recorro tus cuencas fluviales
sendas de noche, caminos de día
como el Bornova recorre tus valles
Tú que con tus inviernos
me enseñaste lo bello del frio
la primavera hace bella hasta la Jara florida
y tus paisajes enseñan todos colores de la vida
los períodos estivales
llenos de fiestas Patronales
llenan mi vida de anécdotas personales
tú que con tus otoños
me enseñaste que entre hayedos
no desaparecen los colores del sendero.
Sierra Norte recorro tus tierras
entre pizarra negra
y esos campos verdes
que no puedo dejar de quererte
Vi a mi padre sembrar tu tierra
el luchar de la azada entre arena y piedra
para dejar la semilla
en una tierra árida
y a veces baldía
que con el tiempo y esfuerzo
Se llenaba de vida
He visto a mi padre asistir a partos
de pequeños corderos
sin estudios ni por nada ayudado
más que ese conocimiento arcano
que tiene haber ganado
el pan con el esfuerzo de tus manos.
A ti Sierra Norte
dedico estos versos
que en realidad son besos
besos agradecidos
porque a pesar de en ti no haber nacido
Tus raíces en mi han florecido
No quiero olvidar la belleza de tus noches
que me llenan de emoción y goce
que mejor sitio para contemplar
el recortar de tus montañas
Sin más iluminación
que la luz de las estrellas
sin más sonido que el latido enamorado de mi corazón
Pseudónimo: El viento de Robledo
Autor: Samuel Muñoz González