Vox exije “controlar y limitar el crecimiento desmedido de las casas de apuestas en Guadalajara”

Solicitará al Ayuntamiento, mediante una moción, “la restricción urbanística de un mínimo de distancia entre cualquier local de apuestas y los centros educativos, culturales, deportivos y juveniles de la ciudad”, entre otras medidas, tal y como detalla el portavoz, Antonio de Miguel

El Grupo Municipal de Vox en el Ayuntamiento de Guadalajara solicitará en el próximo pleno del consistorio de la capital “que el Ayuntamiento estudie la posibilidad y la fórmula para controlar y limitar el crecimiento desmedido de las casas de apuestas y los salones de azar en la ciudad de Guadalajara”, tal y como ha desvelado este martes su portavoz, Antonio de Miguel en una rueda de prensa.

Para ello, Vox propone, a través de una moción que presentará en el pleno del viernes 29 de noviembre, “la restricción urbanística de un mínimo de distancia entre cualquier local de apuestas y cualquier centro educativo, cultural, deportivo y juvenil; estudiar la regulación de la publicidad, el contenido audiovisual y la cartelería en espacios municipales y públicos; diseñar un plan de actividades en los centros escolares y en clubes y equipos deportivos para desvincular el deporte del negocio de las apuestas y para sensibilizar sobre los riesgos del juego, y aumentar el control de acceso a menores de edad por parte de la policía”, explica De Miguel.

Según ha revelado el portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Guadalajara “el centro de la acción política de Vox es la persona y la familia. La adicción al juego afecta cada vez en edades más tempranas. Y por ello hemos estudiado y analizado este asunto y hemos llegado a la conclusión de que tenemos que tomar medidas desde las instituciones porque la adicción al juego afecta cada vez en edades más tempranas”.

De Miguel ha destacado que “las casas de apuestas y los salones de azar han crecido tanto en España como en Guadalajara en un 75 por ciento durante el último lustro”, y ha añadido que “Vox está en contra de convertir a Guadalajara en casas de juego y en casinos encubiertos porque el juego de azar está rompiendo relaciones y llevando a conflictos personales, económicos y violentos dentro de las familias y los barrios”.