Guadalajara teje nuevos espacios sociales

Presentación cuentos infantiles centro social la Trenza
Presentación cuentos infantiles centro social la Trenza

Siempre se ha dicho que en Guadalajara nunca pasa nada. Que todo lo que sucede en la ciudad es «sota, caballo y rey». Pero nada más lejos de la realidad. Durante los últimos años se han ido conformando nuevos lugares de encuentro y participación. Uno de los más conocidos es –quizá– «El Rincón Lento». Sin embargo, no es el único. En 2020 ha cristalizado una nueva iniciativa, «La Trenza», que también ansía posicionarse como un espacio reflexión y encuentro de la sociedad arriacense.

Este reciente proyecto “arrancó gracias a una serie de personas con unas sensibilidades políticas similares”, explica Víctor Aparicio, miembro de la asamblea de la mencionada entidad. “Vimos que en la ciudad había potencial para formar un colectivo de agitación, de reflexión, de crítica y de movilización”. A partir de esta filosofía y de los apoyos recabados, “observamos que era factible la posibilidad de crear un espacio físico donde generar estas dinámicas”.

Así, «La Trenza» comenzó a tomar cuerpo. Se trata de un organismo independiente, aunque inicialmente algunos de los implicados procedían de diversas agrupaciones de la capital. Entre ellas, «El Enjambre», «Abriendo Brecha» o «Mujeres Libres». “Las conversaciones para fundar este centro social comenzaron hace un año y medio”, confirma Víctor Aparicio.

Centro social La Trenza
Centro social La Trenza

Sin embargo, a día de hoy, la mencionada iniciativa es autónoma. De hecho, “«La Trenza» tiene una estructura asamblearia, horizontal, abierta, inclusiva y heterogénea. En nuestro interior caben miradas y opiniones diversas”, subrayan sus promotores. “Cada vez tenemos más gente, vamos sumando incorporaciones. Estamos muy contentos”.

En consecuencia, una de las patas fundamentales de este proyecto fue la apertura de un lugar físico donde poder reunirse y, así, poseer la posibilidad de desarrollar actividades y dinámicas. Con este fin, consiguieron un local en la calle San Juan de Dios, muy cerca de la biblioteca de Dávalos, en pleno centro de la capital. Lo alquilaron en diciembre de 2019.

Pero el emplazamiento “necesitaba una serie de obras para que pudiera ser abierto al público”. Unas actuaciones que se demoraron unas semanas, por lo que se previó su inauguración oficial el 21 de marzo de 2020, una semana después del inicio del confinamiento debido a la pandemia…

A pesar de ello, los ánimos no decayeron. Todo lo contrario. Estaban intactos. De hecho, la apertura del complejo sólo se retrasó un par de meses. Aprovechando la desescalada, «La Trenza» echó a andar físicamente. En junio de 2020 pudieron abrir sus instalaciones. Desde entonces se han programado diferentes actividades, que –en todo momento– respetaron las medidas sanitarias. De esta forma, se ha podido disfrutar de cinefórums; tertulias sobre asuntos de actualidad –también llamadas «trenzulias»–; presentaciones de libros; e, incluso, vermús. “La idea era hacer encuentros sociales más distendidos y, así, «trenzar» tejido social”, explica Víctor Aparicio.

Un trabajo que comenzó a dar sus primeros frutos durante los meses de julio, agosto y septiembre de 2020. “Estamos muy satisfechos y sorprendidos de la buena respuesta que brindó la gente a este proyecto”, confirman los portavoces de la iniciativa. Además, “hay que tener en cuenta que durante la época estival Guadalajara se vacía, ya que muchos ciudadanos se van de vacaciones a sus pueblos o a otros lugares”. Por tanto, estos resultados fueron, si cabe, mucho más positivos…

Centro social La Trenza. Manifestación defensa de servicios públicos
Centro social La Trenza. Manifestación defensa de servicios públicos

Pero la segunda ola de la COVID–19 también afectó este proyecto. Debido a las nuevas restricciones planteadas por la Junta de Comunidades a mediados de septiembre, hubo que cerrar el espacio físico. “Teníamos más ideas, pero debido a la crisis sanitaria derivada de la pandemia, debimos parar el calendario de actividades”, asegura Víctor Aparicio. De hecho, tenían calendada la presentación del primer libro de «Océano Atlántico Editores» para el 17 de septiembre y se tuvo que posponer.

Sin embargo, el espíritu de «La Trenza» continúa intacto. “Seguimos teniendo muchas ideas”. Así, sus componentes comenzaron a organizar excursiones por la provincia. Algunos lugares visitados fueron el Hundido de Armallones o el Ocejón. De esta forma, se conocían diferentes puntos de Guadalajara –desde el punto de vista deportivo y ambiental–, respetando las recomendaciones sanitarias derivadas de la llegada del coronavirus.

“Este cierre debido a la pandemia no implica –en ningún caso– la muerte del proyecto”, confirman sus promotores. “Tenemos la intención de seguir. Pero hasta que podamos reabrir el local, nos hemos planteado programar actividades compatibles con las medidas derivadas del coronavirus”. En este contexto es en el que se han de enmarcar las diferentes excursiones y salidas a la naturaleza previstas. “Es otra forma de tejer redes sociales”.

En cualquier caso, “estamos a la expectativa de cómo se resuelven las Navidades, cómo comienza el año y de cómo van evolucionando las restricciones”. No obstante, “el proyecto sigue en pie”. De hecho, el pasado 13 de diciembre organizaron una concentración frente al Palacio del infantado en defensa de los servicios públicos. La protesta, a la que acudieron decenas de personas, fue un éxito.

El Rincón Lento
No obstante, la llegada de la COVID–19 también se dejó notar en otro de los centros sociales ciudadanos que existen en Guadalajara. Se trata de «El Rincón Lento», donde se tuvieron que suspender todas las actividades y reuniones que tenían programadas. Sin embargo, en este lugar también hay un espacio para el comercio de proximidad. Un ámbito donde ha habido un rayo de esperanza. “Los pedidos y las ventas se han incrementado bastante durante los peores meses del confinamiento”, confirma José Ramón Paramio, tesorero de la iniciativa. “Ha aumentado la venta de productos ecológicos”,

El Rincón Lento
El Rincón Lento

Pero, ¿en qué cosiste este complejo, emplazado en la calle Marqués de Santillana? “«El Rincón Lento» es un espacio que se abrió con la idea de fomentar el consumo responsable, a través del estímulo de productos locales, el trato directo con productores y el comercio justo”, asegura Paramio. “También organizamos actividades culturales de distinta índole. Participamos en la Feria del Libro de Guadalajara, impulsamos exposiciones, etc.”.

Éstas son algunas de las patas sobre las que se ha apoyado dicho centro social desde su fundación hace más de 10 años. Gracias a ello, «El Rincón Lento» ha ido creciendo de manera firme y progresiva –comenzaron una treintena de personas y hoy cuentan con cerca de medio millar de socios–. El lugar se ha convertido en “un espacio para la participación social”.

Por tanto, no es extraño que otras iniciativas arriacenses hayan querido involucrar en el centro social. Entre ellas, «Ecologistas en Acción» o «Abriendo Fronteras». “Estamos abiertos a otros colectivos. También hacemos esa función de encuentro, de generación de red”, confirma José Ramón Paramio. De hecho, aquí tienen su punto de reunión otras agrupaciones de la ciudad. Entre ellas, colectivos de mujeres artistas o coros amateurs.

“Nos alzamos como un espacio abierto para la participación social de la ciudadanía”, confirman sus impulsores.

El Rincón Lento
El Rincón Lento

Precisamente, en el marco de esta política de apertura, también impulsan diversas propuestas. Entre ellas, el «Festival de Cine Lento». “Surgió hace 10 años como una idea de «Contrapicado Films», un colectivo domiciliado en nuestro centro social. Se pretendía ofrecer una propuesta que tuviera como eje la temática de la «lentitud», entendida como otra forma de hacer cosas frente a la rapidez que impone el sistema”, confirman los responsables de la idea. “La primera edición se hizo en la biblioteca y, desde entonces, ha ido creciendo”. Sin ir más lejos, “la última convocatoria ha sido un éxito de público y de participación, respetando –eso sí– todas las limitaciones desprendidas de la pandemia”.

– Pero filosofía de «El Rincón Lento» es muy parecida a la de «La Trenza». ¿Qué tal las relaciones entre ambos centros sociales?

– Son muy buenas –confirma José Ramón Paramio–. De hecho, varios miembros de «El Rincón Lento» son, a su vez, socios de «La Trenza». Y viceversa. Nos gustó mucho la aparición de esta nueva iniciativa.

Por tanto, el impulso social y ciudadano está muy vivo en Guadalajara. Existen varias propuestas que recogen la querencia de los arriacenses por asociarse y desarrollar ideas diferentes. Se distinguen un gran número de alternativas, más allá del asociacionismo tradicional que se producía habitualmente en la capital. De hecho, los vecinos pueden disfrutar de diversas opciones de participación. Una circunstancia que acaba generando consciencia ciudadana. Algo muy importante, porque como diría el filósofo Carlos Fernández Liria:

«Entre todos los proyectos que ha emprendido el ser humano, la aventura de la ciudadanía ha sido la más arriesgada y la más sorprendente»