Tamajón despide el año con su V Certamen de villancicos

La Ronda de Atanzón, participante en este certamen
La Ronda de Atanzón, participante en este certamen

En el centro cultural de la villa agallonera se dieron cita tres clásicos de la Navidad guadalajareña, como son la Real Zambombada de Atanzón, los Cencerrones de Cantalojas y la Ronda de Hita. El certamen lo prologó el alcalde de la villa Eugenio Esteban

El certamen de Villancicos de Tamajón ha llegado, en este final de 2017, a su quinta edición. Tres de las más afamadas rondas y grupos de la provincia, alguno de ellos, como el grupo de Atanzón, con más actuaciones en diciembre que días tiene el mes, según recordaba ayer con humor Valentín Pérez, su director musical, se dieron cita en la villa agallonera para ponerle la banda sonora al fin de año serrano. Cumpliendo ayer su licenciatura, el certamen, poco a poco, se convierte en un clásico de la Navidad en el umbral del Ocejón.

Cantaron, por este orden, en el Centro Cultural de Tamajón, la Ronda de Hita, los Cencerrones de Cantalojas, y la Real Zambombada de Atanzón. Se encargó de prologarlo el alcalde de la villa agallonera, Eugenio Esteban. Después de dar la bienvenida a los grupos presentes y al público, que casi llenaba el Salón de Actos del Centro Cultural, y de desear un feliz 2018 a todos los presentes, el regidor expuso, con un deje de nostalgia, que pese a que Tamajón cuenta con recursos materiales, “nos faltan los humanos, y esos no se pueden sustituir. El patrimonio más importante de un pueblo son sus personas, y cuando alguien se ausenta se crea un vacío en la comunidad, que no se puede llenar si no es con sus recuerdos”. Eugenio Esteban también afirmó que si a la natural desaparición de los mayores se añade que los jóvenes, por motivos laborales, también se marchan del pueblo, “ambas circunstancias merman el padrón de habitantes a una velocidad que da vértigo, así que,  además de prestar los mejores servicios tendremos que tocar en otras teclas para que la población no siga disminuyendo. Seguro que alguno de vosotros puede hacer algo por nutrir el censo de habitantes de vuestros pueblos”, afirmó.

La música empezó a sonar con la Ronda de Hita. Su primer villancico fue la combinación de las ‘Alegrías de Tendilla’. A continuación, se dejó notar la presencia de los Cencerrones de Cantalojas, que ningún año faltan a su cita con el pueblo Tamajón.

La Real Zambombada de Atanzón, hizo su entrada como corresponde, al son de la percusión que les da nombre. Empezaron con la ‘Ronda de Atanzón’, siguieron con  ‘Buscando en Belén’ y terminaron con  un clásico de Antonio Machín,  dedicado a la madre.

Para terminar la tarde de rondas y villancicos, el Ayuntamiento de Tamajón invitó a todos los grupos presentes a unas gachas, migas, y una limonada, en una inolvidable tarde del penúltimo día del año.