La Junta reivindica ajustar las demandas hídricas a los recursos

Entrepeñas es uno de los pantanos que más están sufrido por la sequía
Entrepeñas es uno de los pantanos que más están sufrido por la sequía

El Gobierno de Castilla-La Mancha apuesta porque cada cuenca hidrológica ajuste sus necesidades y demandas a los recursos que tiene

 

El Gobierno regional ha mantenido un encuentro con el Ministerio de Medio Ambiente para dar los primeros pasos en la elaboración del Pacto Nacional del Agua, que se prevé desarrollar en 2017 y tener finalizado durante el verano de 2018.

Los cuatro ejes que sostienen este pacto son: la atención de los déficits, el cumplimiento de los objetivos ambientales fijados en los Planes Hidrológicos, la puesta en marcha de los Planes de Gestión de Riesgos de Inundación y otra serie de medidas en materia de gobernanza del agua.

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha apostado porque “cada cuenca hidrológica debe ajustar sus necesidades y demandas a los recursos que tiene”, ya que “lo que no pueden hacer los planes hidrológicos de cada una de las cuencas es remitirse al Plan Hidrológico Nacional, porque nos resultaría absurdo si al final todas dicen que son deficitarias; porque ¿a dónde se van a remitir todas para la satisfacción de sus demandas?”.

DIRECTORA AGUA Y LUENGOAsí lo ha expuesto el director gerente de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Antonio Luengo, durante la reunión que ha mantenido con la directora general del Agua del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente (MAPAMA), Liana Ardiles, en el marco de la ronda de contactos que se están manteniendo con todas las comunidades para abordar el proceso de debate para crear un Pacto Nacional del Agua.

Luengo ha recalcado que el agua es “un bien cada vez más escaso y que tiene una influencia climática cada vez mayor porque hay un déficit importante”. De esta forma, el director gerente se ha hecho eco los cuatro ejes que se tratarán para dar forma a este futuro pacto: la atención de los déficits, el cumplimiento de los objetivos ambientales fijados en los Planes Hidrológicos, la puesta en marcha de los Planes de Gestión de Riesgos de Inundación y otra serie de medidas en materia de gobernanza del agua.

El responsable de la Agencia del Agua ha informado que este proceso se quiere desarrollar durante este 2017 para tener el pacto concluido durante el verano del año 2018. El Ministerio se va a reunir con todas las comunidades autónomas y también con agentes sociales, representantes de los usuarios y grupos parlamentarios.

Respecto a la satisfacción de las demandas, Luengo ha dicho que se pretende “establecer una especie de catálogo con los trasvases establecidos por ley para que en la planificación hidrológica nacional se contengan las cuestiones importantes que tengan que incorporar la Ley del Agua”.

El director de la Agencia del Agua ha añadido que sobre los planes de sequía es necesario un “consenso” para encontrar una situación de regulación.

Por otro lado, Luengo también ha puesto sobre la mesa el tema de las infraestructuras que habrá que realizar para paliar el déficit y “ver si es inevitable”, ya que “hay algunas que para Castilla-La Mancha son importantes en cuanto al abastecimiento de agua potable a poblaciones de zonas como el Alto Guadiana, así como intentar solucionar el problema en el centro de intercambio de recursos y debe ser el Ministerio el que tome la iniciativa en el reparto del agua, porque solo la administración puede hacerlo de forma ecuánime y no a través de la compraventa privada”.

Respecto a los objetivos medioambientales, el encuentro ha tratado los sistemas de depuración y de los caudales ecológicos, con especial atención a los ríos Ebro y Tajo, para que se lleven a cabo unas líneas generales para la gestión de los espacios emblemáticos; así como se ha propuesto el establecimiento de fondos comunitarios para gestionar, a través de una guía de buenas prácticas, las ayudas en caso de las inundaciones urbanas, tanto en lo que se refiere a las medidas medioambientales ligadas al cambio climático, como las medidas estructurales para poner en marcha infraestructuras que puedan evitar riesgos.

En último orden, Luengo se ha referido a la gobernanza del agua, aspecto en el que el Ministerio quiere oír los procedimientos para mejorar cada día la administración del agua y así, poder establecer un sistema de recuperación de costes con carácter ambiental para aquellos que utilizan el agua y lo devuelven en condiciones “precarias”; todo ello “en pro de solucionar los problemas medioambientales”, ha subrayado.